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La fasciolasis en Jamaica: aspectos epidemiológicos y económicos de una zoonosis parasitaria transmitida por caracoles

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LA FASCIOLIASIS

EN JAMAICA:

ASPECTOS

EPIDEMIOLOGICOS

Y ECONOMICOS

DE UNA ZOONOSIS

PARASITARIA

TRANSMITIDA

POR CARACOLES’

D. A. P. Bundy,’ P. V. Arambulo

III3 y C. L. Grey”

La fasciolzizsis es endémica en Jamaica. En este estudio se emplean datos obtenidos en encuestas y otros relacionados con la producción de ganado, para evaluar la salud animal, la salud pública vetenizan’a y Las repercusiones económicas de la enfermedad.

2 Introducción \

Fakola hefiat&, el agente etiológico de la fascioliasis en la región del Caribe, se ha difundido por todas las islas principales de las Grandes Antillas y existen focos en dos islas (Martinica y Santa Lucía) de las Pequeñas Antillas.

De acuerdo con un estudio realizado por la Organización Panamericana de la Salud (I), la fascioliasis causa enormes pérdidas a las industrias que producen alimentos de origen animal en Cuba, Haití, Jamaica y la República Dominicana. La importancia de estas pérdidas puede cuantificarse en parte examinando la prevalencia del deco- miso de hígado vacuno, un indicador de la morbilidad provocada por la infestación con duelas hepáticas. En este aspecto,

’ Se publica en inglés en el Bul&ftir of the Pan Amen.can Heaith

07gantiatim, Vd. 17. No 3, 1983. El estudio inchido aquí forma parte del Proyecto de Salud Animal y Salud Pública Veterhatia (JAM-SSCII) puesto en práctica por el Gobierno de Jamaica, la Orga- nización Panamericana de la Salud y el Programa de las Naciones b U$das para el Desmmlkx

Universidad de las Indias Occidentales, Departamento de J

Zoologia , Kingston 7. Jamaica.

’ Orgmización Panamericana de la Salud. WashinSton. DC. 4 EUA.

?’ 4 Miiterio de Agricuhra. División de Veterinaria, Hope Gar- %

das. Kingston 7, Jamaica.

Dobsinsky (2) encontró índices de decomi- so de hígado que oscilaban entre el 10,7 y el 82,9% en Cuba en 1968; Barnish et al. (3) hallaron índices que variaban entre el 9,8 y el 23% en Santa Lucía en 1978 y Gentilini et aZ. (4) descubrieron que se de- comisó el 60% de los hígados vacunos en un matadero haitiano en 1964. Por otra parte, Frame et al. (5, 6) han señalado un índice de decomiso de hígado del 3,18’% en Puerto Rico. Se han investigado las con- secuencias económicas de estas perdidas de proteínas animales en este ultimo país, donde la perdida monetaria directa en el valor al menudeo de las reses, causada por el decomiso de entrañas, se elevó de US$24 400 en 1948-1949 (7) a 2 270 000 en 1976 (6).

La fascioliasis humana también tiene una larga historia en la región del Caribe (8), pero se ha considerado que la enfer- medad tiene una importancia secundaria para la salud pública. No obstante, datos recientes de Cuba y Puerto Rico han seña- lado que los casos clínicos son más frecuen- tes de lo imaginado y que no se detecta un número aun mayor de infecciones asinto- máticas en el hombre (9, 10).

Se ha detectado distomiasis hepática en Jamaica desde comienzos de este siglo (‘11,

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12). En estudios preliminares sobre la epidemiología de la enfermedad, se ha identificado Lymnaea (= Fossaria) cuben- sis como huésped intermediario (13) y se ha comprobado la presencia de la infec-

ción en ovejas (14) y cabras (15) de la isla. Como consecuencia de la importancia económica y para la salud pública que tiene la fascioliasis en Jamaica, el estudio presentado aquí fue realizado por la Uni- versidad de las Indias Occidentales, el Co- bien-ro de Jamaica (División de Veterina- ria) y la Organización Panamericana de la Salud. En el estudio se trató de cuantificar variables epidemiológicas relacionadas con la presencia, y morbilidad de la fascioliasis, y de estimar las pérdidas económicas ac- tuales atribuibles a la persistencia de la en- fermedad.

Material y métodos

La prevalencia nacional de la fascio- liasis de los rumiantes en Jamaica se esti- mó analizando muestras fecales de gana- do bovino, ovino y caprino, entre no- viembre de 1979 y abril de 1980. Se reunieron muestras en toda la isla excepto en la región de Cockpit Country, en el oeste, y en las montañas Blue y John Crow en el este, a causa de la inaccesibilidad de estas zonas.

En cada uno de los 13 municipios rura- les de Jamaica, se seleccionaron 48 ejem- plares de ganado bovino y 48 de ganado caprino. Cada municipio fue dividido en cuadrantes de igual superficie y se reunió en cada uno un total de 12 muestras feca- les provenientes de no menos de cuatro granjas distintas.

Se obtuvieron muestras de ovejas en los seis municipios donde la cría de ganado ovino era una actividad importante. El ta- maño de la muestra se ajustó en cada zona estudiada para que incluyera aproximada- mente el 10% de todo el rebaño.

Se recogió el mismo número de muestras

provenientes de ganado bovino de 3 a 9, 10 a15, 16a21~22a27mesesdeedad,yde

ovejasycabrasde9a15, 16a21,22a27y 28 a 30 meses de edad.

Las muestras fecales fueron reunidas por la División de Veterinaria del Ministe- rio de Agricultura, a través de su sistema nacional de veterinarios municipales y au- xiliares de salud animal. Se completó la historia pro-forma de cada animal y se to- maron muestras fecales rectales de 4 a 5 g, que se enviaron dentro de las 24 horas a los Laboratorios Centrales de Veterinaria en Kingston para ser analizadas. En el caso de los municipios occidentales, las muestras se enviaron por avión.

Todas las muestras analizadas (véase el cuadro 1) se examinaron dentro de las 36 horas posteriores a la toma, utilizando una técnica modificada de doble flotación (16). Se consideró que la detección de un solo huevo de F. hepatica después de la flo- tación con sulfato de zinc indicaba la pre- sencia de infección.

Resultados y discusión

Estudio epidemiológico

En el cuadro 1 se muestra el tamaño re- lativo de las muestras de poblaciones de rumiantes incluidas. Se excluyó del estudio a los vacunos y caprinos que habían recibi- do tratamiento con antihehnínticos menos de seis semanas antes de la toma de mues- tras. Los porcentajes totales de animales excluidos, 16,7 y 12,4oJ, respectivamente, estaban distribuidos en forma homogénea y no produjeron sesgos en relación con re- giones o edades. Se incluyeron en el estu- dio los datos de todas las ovejas selecciona- das ya que la mayoría de los ovinos había recibido antihehnínticos recientemente y, por consiguiente, era poco práctico efec- tuar exclusiones.

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CUADRO l-Número de vacunos, caprinos y ovinos incluidos en la encues- ta; cantidad estimada de cabezas de los respectivos ganados en todo el país; porcentaje de cada tipo de ganado del país incluido en la encuesta.

Tipo de ganado

Muestras fecales Cantidad estimada Porcentaje del ganado NO NO de cabezas en el del país incluido reunido analizado país (miles) en la muestra

VXUIIO

Caprino Ovino

624 520b 358,9’ 0,14

5w 514b 368,6’ 0,14

268 268 2,2* 12,2

a Datos incompletos en relación con el municipio de Hanover.

b Se excluyeron del estudio las muestras del ganado bovino y caprino que había recibido antihelmínticos menos de seis semanas antes de la recolección de muestras.

’ Extrapolación de la OPS, basada en datos de censos del Ministerio de Agricultura correspondientes a 1958-1968.

d Ekimación realizada durante la encuesta.

nado caprino y bovino infectado. Se identi- ficaron rebaños infectados en cuatro tipos distintos de zonas ecológicas: las llanuras aluviales irrigadas del centro del municipio de Clarendon y del sur del municipio de St. Catherine, las altiplanicies de clima Ilu- vioso, las zonas costeras con lluvias intensas (200 cm al año) de los municipios de St. Thomas y Portland, y las zonas pantanosas (ciénegas) de los municipios de St. Eliza- beth y Westmoreland. Todas estas zonas se caracterizan por la existencia de hábitats acuáticos permanentes o alimentados con frecuencia.

Las ovejas infectadas estaban circunscri- tas a las zonas costeras del municipio de Portland. La relativamente escasa presen-

cia de fascioliasis en esta especie tal vez sea resultado del difundido uso de antihelmín- ticos, pero también podría ser consecuen- cia de la actual distribución geográfica del ganado ovino. En Jamaica, el número de ovejas descendió de 6 200 animales en 1967 (17) a 2 200 en 1981, y la mayoría de los rebaños se encuentran ahora en zonas áridas y bien avenadas. En total, el 83% de las ovejas está actualmente fuera de las zonas endémicas indicadas en la figura 1; esto quizá refleje una exclusión intencional de los rebaños de zonas que se asocian con la fascioliasis ovina aguda.

La figura 2 muestra la prevalencia de fascioliasis en el ganado vacuno y caprino de cada municipio, de acuerdo con los re-

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FIGURA 2-Datos que indican la presencia de infección con F, hepatica en los municipios de Jamaica. Los grbficos superior e inferior(A y C) muestran los porcentajes de muestras fecales de caprinos y vacunos que resultaron positi- vas en la encuesta coprológica. El gráfico del medio (B) muestra el promedio de hígado decomisado (en kg) por animal sacrificado.

60% A % de muestras fecales de vacunos

que contenían huevos de F. hepanca

Kg de hígado vacuno decomlsado por ammal faenado

% de muestras fecales de caprlnos que contenían huevos de F. heparica

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cuencia , se registran los decomisos de vísceras como peso total decomisado en un determinado municipio cada mes, sin indi- car el número de animales sacrificados que estaban infectados. Para nuestros propósi- tos, las cifras que proporcionan una base para la comparación entre municipios se obtuvieron dividiendo el peso total (en kg) del hígado decomisado infectado, por el número de animales sacrificados; esto dio como resultado una apreciación aproxi- mada de la intensidad de la infección.

En el ámbito nacional, la prevalencia de fascioliasis bovina indicada por la encuesta coprológica fue del 22,2%. Además, la comparación de estos resultados y los datos sobre el decomiso de vísceras correspon- dientes a los distintos municipios, indican una distribución geográfica correlativa, en la que es mayor la prevalencia en los muni- cipios orientales y occidentales.

De acuerdo con la encuesta, la distribu- ción por municipio del ganado caprino in- fectado con fascioliasis es algo semejante a la observada en los vacunos; en todo el país, la prevalencia de infestación en los caprinos fue de 17,2oJ,. Los registros del decomiso de vísceras de cabra no eran ade- cuados como base para la comparación con estos datos.

Se detectaron ovejas infectadas en un so- lo municipio y la prevalencia nacional de la fascioliasis en las ovejas fue de apenas el 0,72 $%. Este resultado probablemente sea consecuencia de la virtual exclusión de las ovejas de las zonas en que era endémica la duela y del amplio uso de antihelmínticos por parte de los criadores locales.

Los datos correspondientes a los vacunos presentados en la figura 2, muestran que el método de análisis fecal empleado no de- tectó infecciones en algunas zonas en las que la inspección de vísceras comprobó la existencia de fascioliasis. Esto tal vez se de- ba al empleo de la técnica de sulfato de zinc que, si bien es apropiada para las en- cuestas en masa cuando son limitados los recursos técnicos, sacrifica la sensibilidad a

la conveniencia y da resultados que tien- den a subestimar la prevalencia de infec- ciones de escaso grado.

Se evaluó la influencia de las condi- ciones climáticas (lluvias y altitud) exami- nando la distribución de las granjas con fascioliasis “endémica”; se consideró gran- ja “endémica” aquella en la que se detectó la infección en por lo menos un animal del rebaño de vacunos o de caprinos. Como muestra la figura 3, se encontró la infec- ción en todas las zonas lluviosas de Jamaica (aquellas en las que la precipitación plu- vial oscilaba entre 100 y 500 cm al año). Sin embargo, la prevalencia de granjas en- démicas fue mayor en los lugares en que la precipitación anual superaba los 250 cm. No se detectaron infecciones en rebaños de vacunos situados en altitudes superiores a los 750 m, ni en rebaños de caprinos que estaban a más de 600 m sobre el nivel del mar. Además, el porcentaje de granjas con cabras y vacunos infectados estaba en rela- ción inversa con la altitud y era mayor por debajo de los 150 m.

Se efectuó una estimación aproximada de la interacción entre precipitación y alti- tud utilizando los datos del cuadro 2. Co- mo era de prever, el porcentaje de granjas “endémicas” con ganado vacuno y caprino infectado fue más elevado en los lugares si- tuados por debajo de los 300 m, con una precipitación superior a los 200 cm anuales. El porcentaje disminuía conforme aumentaba la altitud: por último, se en- contró solo un rebaño infectado entre los 44 rebaños de ganado vacuno y caprino incluidos en la encuesta que estaban a alti- tudes superiores a los 600 m.

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FIGURA 3-Relación entre la precipitación y la altitud de la granja, y la preva- lencia de fascioliasis entre el ganado caprino v vacuno. En cada caso se indica entre paréntesis el número degranjas irhuidas en la encuesta.

Precipltaclón (cm/aRoJ co

en altitudes elevadas, es más difícil de explicar. Las temperaturas medias tienden a ser más bajas en altitudes superiores. Por ejemplo, los datos proporcionados por el Servicio Meteorológico de Jamaica indican que en las llanuras de St. Catharine (con una altitud menor de 30 m) se producen temperaturas que varían entre 10,l y 35,6 OC, con una mínima y una máxima anuales de 15,3 y 3 1,9 OC respectivamen- te. A una altitud considerablemente ma- yor, en un lugar del municipio de St. Andrew, llamado Cinchona (a 1 500 m de altitud), la temperatura oscila entre 8,3 y 27,2 OC, con una mínima y una máxima anuales de ll ,7 y 23,0 “C respectivamen-

50

1

(4

Precipitación (cm/año) -

i= m

0 500 900

Altitud (metros)

te. No obstante, a pesar de esas tempera- turas bajas, el índice de prevalencia en Cinchona iguala o supera los índices obser- vados en las zonas del sur de Estados Uni- dos de América, donde es endémico un ciclo de F. hepatica mantenido por Fossa- rz¿z cubensk Por consiguiente, parece po- co probable que las temperaturas bajas excluyan F. cubensis de las zonas elevadas de Jamaica, si bien la especie autóctona del caracol podría haberse diferenciado para adaptarse a las temperaturas más ele- vadas que se encuentran a menor altitud.

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CUADRO a-porcentajes de granjas que criaban vacunos y caprinos infectados con fascioliasis, a di. versas altitudes y con distintos regímenes pluviales.

Granjas que tenían vacunos Granjas que tenían caprinos

Altituda

Precipitación anual Precipitación anual Precipitación anual Precipitación anual 5 200 Cd > 200 cm 5 200 cm > 200 cm Granjas % con Granjas % con Granjas % con Granjas % con incluidas fascioliasis incluidas fascioliasis incluidas fascioliasis incluidas fascioliasis

< 300 metros 90 32,2 57 52,6 75 18,7 67 44.8

300-600 metros 45 13,3 55 20,o 38 5.3 31 22.6

> 600 metros 12 8.3 16 o,o 10 o,o 6 o,o

a Las altitudes a que se encontraban las granjas se estimaron de acuerdo con un mapa trazado por el Directorate of Oveneas Surveys Ordinance Survey Office, Reino Unido, 1976 (DOS 410. Series E 721, 150 000, 1976).

b Las precipitaciones anuales se establecieron sobre la base de los datos proporcionados por el Servició Meteorológico del Gobierno de Jamaica.

huésped. Esto parece bastante probable, ya que los cerros de caliza son terrenos per- meables y con pendiente pronunciada y, en consecuencia, impiden la formación de hábitat y favorecen el escurrimiento de las aguas. Por el contrario, las zonas altas con una elevada precipitación anual, caracte- rizadas por la existencia de rápidas corrientes de agua temporales, son en apa- riencia particularmente inadecuadas para la formación de hábitats apropiados para el caracol huésped. Por consiguiente, pa- rece que, en el contexto jamaiquino, la cantidad de precipitación pluvial por sí so- la no es un buen indicador de la endemici- dad de la duela.

Se investigó el carácter estacional de la fascioliasis en Jamaica utilizando los datos sobre decomiso mensual de hígado vacuno en 1978 y 1979 (figura 4). El peso de las vísceras decomisadas no varió en forma significativa durante el año. Estos resulta- dos, que concuerdan con un patrón de fas- cioliasis bovina crónica, no proporcionan indicios de la incidencia o el carácter esta- cional de la infección.

Repercusiones económicas

Pérdidas directas

Mortalidad. No se ha señalado en Ja-

maica la muerte de vacunos a causa de migración intrahepática de F. hepatica, si bien en informes anecdóticos se ha indica- do que la disfunción hepática asociada con la infección crónica puede ser un factor co- adyuvante en algunas muertes. En ovejas y cabras se ha observado fascioliasis aguda, en la que la función hepática resulta comprometida por la infección simultánea masiva (13, 18). De hecho, todo un hato de cabras de una zona con lluvias intensas sucumbió en una sola estación y esto di- suadió a los granjeros locales de criar ru- miantes pequeños.

Como indican estas últimas observa- ciones, la fascioliasis aguda de los rumian- tes pequeños provoca dos tipos de pérdida: el daño al ganado y a su posible progenie, y la exclusión futura de rumiantes pe- queños de las zonas de pastoreo donde existe un gran riesgo de contraer la enfer- medad. Este ultimo elemento tiene parti- cular importancia en las islas pequeñas, donde la tierra de pastoreo es limitada; no obstante, ninguna de estas pérdidas ha si- do adecuadamente cuantificada en Ja- maica.

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FIGURA 4-Número de bovinos faenados en Jamaica (parte sombreada de las columnas) y cantidad (en kg) de hígado vacuno decomisado entre 1978 y 1979, por mes.

Peso medio de

o y,v ,,,,,,,,,,,,, II” 1.1.1 II” ,,.. - EFMAMJJASONDIEFMAMJJASOND

0 Vacunos faenados (millares)

1978 1979

migratorios. Esta intensidad de la infec- ción puede compararse con la encontrada en vacas lecheras de la zona de irrigación de Macalister en Australia, 24~7 (n = 49) por animal, y entre vacunos de Belfast, Irlanda del Norte, 67 (n = 900) (20). Las infecciones con formas maduras del pará- sito se asociaban con fibrosis y calcificación de las vías biliares principales, y con fibro- sis parenquimatosa.

En el cuadro 3 se presentan las cifras to- tales de decomiso de hígado vacuno re- gistrado en Jamaica durante el período de 1978 a 1980; esas pérdidas parecen haber sido causadas casi en su totalidad por le- siones provocadas por duelas. Las pérdidas

se expresan en términos del peso del hígado recortado y desechado. En conjun- to, se estimó que el valor medio anual al menudeo del hígado decomisado fue de J$257 000 (US$ 1 = J$ 1,78).

En el mismo período de tres años, los mataderos con licencia sacrificaron un promedio de 26 000 cabras al año. La car- ne de cabra al curry es un platillo tradi- cional en las reuniones jamaiquinas; por lo general, se compran los animales en pie y se los sacrifica en el lugar. Se calcula que el 80% de todas las cabras faenadas son sacrificadas de esta forma; por lo tanto, el numero de cabras faenadas anualmente en la isla sería de aproximadamente 130 000

CUADRO 3-Estimación del valor del hígado de vacuno decomisado a causa de la fas- cioliasis en Jamaica. Se efectuó la estimación sobre la base de estadísticas acerca de los va- cunos faenados en el período de 1978 a 1980 [27,22) y según el supuesto de que el 22,2% de los vacunos sacrificados estaban infectados.

AñO Promedio de los

1978 1979 1980 tres años

No de vacunos faenados 59 308 59 995 63 995 61 099 Peso del hígado decomisado

(en W 32 147 33 037 30 399 31 861

Valor estimado u$ 1,78 = US$ 1) J$ 259 000 J$ 266 000 J$ 245 000 J$ 257 000 Pérdida estimada por animal

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cabezas. En 1980 se “recortaron” 1 400 kg de hígado de las 29 600 canales de cabra que se inspeccionaron oficialmente. Alre- dedor del 50% de este recorte obedeció a la necesidad de eliminar lesiones hepáti- cas; si se efectúa la extrapolación de estos datos para cubrir la población de cabras sacrificadas anualmente, estimada en 130 000 animales, se descubriría que cada año resultaron inútiles para el consumo unos 3 250 kg de hígado de cabra, con un valor al menudeo de aproximadamente J$ 29 000.

En contraste, las pérdidas de hígado de ovinos fueron relativamente leves. Los ma- taderos con licencia faenaron un promedio de 1 230 ovinos al año entre 1978 y 1980. La industria turística, abastecida casi por completo por carniceros con licencia, constituye actualmente el principal merca- do para el cordero. Este hecho, sumado al pequeño número de ovinos, da verosimili- tud a ese cálculo. Al extrapolar esta cifra, el costo nacional del decomiso de vísceras de ovinos resulta insignificante y represen- ta alrededor de J$ 280.

Si el método actual del “recorte” fuera sustituido por el decomiso de toda la vísce- ra, aumentaría considerablemente el costo de la enfermedad. Por ejemplo, si supone- mos que el peso medio del hígado es de 5,0 kg por cabeza en el caso de los vacunos y de 1,5 kg en el de las cabras (23, 24), el costo de decomisar el hígado de vacunos infectados (22,2oJ, del ganado del país)

equivaldría a unos J$ 546 000 anuales, mientras que el costo de decomisar el hígado de las cabras infectadas (17,2% del ganado) llegaría a alrededor de J$ 303 000 al año.

Producción de leche. Antes de conside- rar los efectos de la fascioliasis sobre la pro- ducción láctea, es necesario definir la contribución de la producción local de leche a la industria lechera jamaiquina. Se estima que el consumo nacional de pro- ductos lácteos es de 160 millones de litros de Equivalente de Leche Fresca (ELF) al año, de los cuales se importa el 75% (25, 26). No se fabrican mantequilla y queso en establecimientos locales pero sí se someten a tratamiento esos productos y se reempa- can en el país. Los productos lácteos sóli- dos importados constituyen el principal componente de los helados, la leche con sabor, la leche malteada y la leche esterili- zada (TUE)s que se producen en el país.

El consumo total y per cápita aumentó durante el pedodo de 1960 a 1974; la leche condensada mantuvo su predominio en el mercado local (cuadro 4A). Las estima- ciones acerca de la producción nacional de leche fresca (cuadro 4B) indican un ligero aumento durante ese período, si bien se ha cuestionado la exactitud de estos datos: por ejemplo, la producción de 1967 se ha calculado en cifras muy diversas: 42,29

5 TUE: temperatura ultraelevada.

CUADRO 4A-Consumo de leche producida en Jamaica, en millo- nes de litros de Equivalente de Leche Fresca.

Tipo de leche Consumo

Descremada Entera Consumo per cápita Alio Líquida Condensada en polvo en polvo total (litros)

1960a 24,7 31.2 27,3 0,9 84,l 51,9

1967’ 35,0 52,l 21,l 7.0 115,3 60,7 1974bB d 46,6 61,4 22,o 23.7 153,7 101.7

= Fuentes. (27, 28). b Fuente: (25). ‘, Fuente: (29).

(10)

CUADRO 4B-Producción nacional de leche en Jamaica, en millo- nes de litros.

Distribución de la leche Para uso Establecimientos

de la Alimentación de condensa- Procesa- Leche Producción Año granjaa de temerosa ció+ b dores’ cmdad total

1960 1,5 1,9 13,2 17,0 4,4 38,0=

1974 2,0 2,4 32 21,9 19,3 48,8b

1981d 1,8 22 2,o 16,6 22.1 44,7

a Fuente: (25). b Fuentes: (27, 28)

’ Fuente: (29). d Datos estimados.

millones de litros (30), 33,lZ millones de litros (28) y 17,51 millones de litros (25).

Parecen existir cuatro vías principales de distribución de la leche fresca produci- da en el país. Según se indica en el cuadro 4B, en 1981 se retuvo en la granja alrede- dor del 9% ; aproximadamente el 40% fue pasterizada y empacada por “procesado- res” para enviarla al mercado de leche líquida; una cantidad no precisada pero importante se vendió como leche cruda por vías de abastecimiento irregulares; por último, una parte en constante disminu- ción fue suministrada a establecimientos de condensación.

Este patrón de distribución se asocia con un sistema múltiple de precios en el que la leche de calidad “A” se vende a los proce- sadores a J$ 0,83 el litro, la de calidad “B” se entrega al condensador a J$ 0,58 el litro y la leche cruda se vende a precios que tienden a superar el de la leche de calidad “Al’, sin que existan costos de procesa- miento. Es entonces evidente que más del 80% de la leche de producción local que se vende alcanza un precio mínimo en la granja de J$ 0,83 por litro.

Se sabe que la fascioliasis crónica dismi- nuye la calidad y cantidad de leche produ- cida por vacas infectadas (31, 32). En ge- neral, se puede mostrar el efecto positivo del tratamiento antihelmíntico sobre la producción nacional de leche, por medio de la siguiente relación:

Mt = Y, . N . Pm . Pi . Pt

donde Mt = la mejora en la producción nacional gracias al tratamiento con antihehnínticos (en litros); Y, = la pro- ducción anual de leche por vaca en lacta- ción (en litros); N = el número de vacas lecheras en el país; P, = la proporción de vacas en lactación al mismo tiempo; Pi = proporción de ganado lechero con fas- cioliasis, y Pt = el aumento porcentual en la producción media de leche de animales infectados, causado por el tratamiento.

Se emplean dos estimaciones de Y,. Una de ellas, 1 775 litros por vaca y por año, se aproxima a la producción media actual. La otra, 2 420 litros por vaca y por año, es la producción proyectada por el Ministerio de Agricultura para los rebaños “mejorados” y representa la producción prevista cuando el ganado lechero del país sea de mejor calidad.

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tadas de las zonas central sur y sudoriental de Jamaica y en el 60% de las granjas lecheras se usan métodos de irrigación del suelo para mejorar los pastos.

Se estima que Pt (el porcentaje de aumento de la producción de leche como consecuencia del tratamiento) equivale al 8%. Este cálculo se basa en un informe de Ross (31) que encontró que una infección “poco intensa” con aproximadamente 100 duelas, disminuía en un 8% la producción de leche de una vaca, mientras que las in- fecciones “intensas” podían reducir esa producción en más de un 2001,.

Como muestra el cuadro 5, si se usan estas cifras en la formula antes incluida, los resultados indican que el tratamiento eficaz con antihelmínticos podría lograr un aumento de la producción láctea que variaría entre 0,82 y 1,09 millones de litros al año, cantidad que equivaldría a una suma de J$470 000 a 910 000.

Producción de carne. Las infecciones con menos de 50 duelas por cabeza pueden reducir transitoriamente hasta en un 8% el aumento de peso del ganado de consumo y disminuir su eficiencia en la conversión de forraje hasta en un ll ‘% (33, 34). Sumados, estos efectos causan una disminución importante en el peso en

canal limpia cuando los animales llegan a la edad de ser faenados. El cuadro 6 pre- senta las estadísticas sobre producción anual media de carne bovina, caprina y ovina, durante el período de 1978 a 1980 (21). De acuerdo con esas cifras, aun una disminución del 1% en el peso medio en canal representaría un costo económico para la industria de alrededor de J$ 825 000.

Pérdidas indirectas

Costos de tratamiento. El cuadro 7 muestra la proporción de granjas con ga- nado ovino, caprino y bovino, en las que se emplean antihelmínticos para comba- tir F. hefiatica. La proporción está en re- lación directa con el tamaño del rebaño y los porcentajes más elevados correspon- den a los rebaños grandes. En el cuadro 8 se han extrapolado estos datos para esti- mar el gasto ocasionado por la fascioliasis a la industria ganadera nacional, calcula- do en J$ 560 700 al año. Esto representa un gasto medio de unos J$ 2,00 por cabe- za; el promedio de gastos por cabeza es re- lativamente mayor para los granjeros que tienen rebaños grandes. Estos costos de

CUADRO 5-Aumento proyectado de la leche producida por vacas infectadas, después de la administración de antihelminticos.

Valor de la producción total actual v de la uroducción total proyktada, ‘,n millones J$ Producción de leche

Por vaca Total

(en litros (en millones de Al precio de Al precio de al año) litros al año) la calidad A la calidad B Según la productividad actual del ganado lechero del Pa&

Antes del tratamiento 1 775 44,70 Después del tratamiento 1 806 45,52 Beneficio proyectado 0,82

37.10 25,93 37,78 26.40

0,68 0,47

Según una productividad “mejorada”, proyectada paTa el ganado lechero del psis Antes del tratamiento 2 420 60.98 50.61 35,37 Después del tratamiento 2 463 62,07 51,52 36,00

(12)

CUADRO I-Producción anual de carne en Jamaica durante el periodo de 1976. 1960.

Peso de los animales sacrificados No de animales Peso en vivo Peso en canal Tipo de ganado sacrificados al año (millones de kg) (millones de kg)

Vacunos 59 779 ll,66 9,72

Caprino9 26 083 033 0,27

Caprinosb 130 000 1,63 1,36

Ovinos 1 234 0,02 0,02

Fuente: (21).

’ Caprinos faenados en mataderos con licencia.

b Estimación de caprinos faenados (80% fuera de Los mataderos con licencia).

tratamiento no incluyen el costo de la ma- no de obra necesaria para administrar los antihelmínticos, el costo de comprar y transportar los fármacos y los costos de oportunidad.6

Los cálculos que existen en relación con cantidades gastadas en servicios veterina- rios para el ganado en Jamaica, se limitan al ganado lechero. En 1969 Atsu (28) esti- mó que el costo medio de la inseminación artificial, medicinas y servicios, llegaba a J$ 6,40 por vaca lechera, cantidad que representaba el 3,3% de los costos totales de producción. Recientemente, el Minis- terio de Agricultura ha estimado que este costo se había elevado a J$ 49,00 en 1982, suma que aún equivalía a aproximada- mente la misma proporción (3,8 %) de los costos de producción.

En cuanto al costo del tratamiento de caprinos, es preciso señalar que la cría de cabras está difundida en toda Jamaica, tanto en zonas rurales como urbanas; el hato típico está constituido por dos cabras de cría y su progenie. En granjas cuya ex- tensión varía entre 50 y 200 hectáreas, la densidad media de cabras es de solo 2,76 cabezas por unidad (17). Los rebaños de

’ Cuando debe hacerse uso del financiamiento para mantener el status que (por ejemplo, para garantizar la salud del ganado), dicho financiamiento no está disponible para la expansión y el de- sarrollo. Por consiguiente, el costo del tratamiento tiene dos com- ponentes: el costo monetario real y la pérdida de una cantidad equivalente de los fondos de capital disponibles para el desarrollo. Fste último componente se denomina “costo de oportunidad”.

más de 10 animales son poco frecuentes y probablemente hay menos de 10 rebaños con más de 100 cabezas. Esta relativa in- dependencia del tamaño del hato de cabras con respecto a la superficie de las granjas, contrasta notablemente con lo que sucede en el caso de los vacunos, don- de el 54% de las cabezas de ganado bovi- no de todo el país se concentra en el 0,2% de las granjas (véase el cuadro 8).

En consecuencia, para nuestros propó- sitos se da por supuesto que todas las cabras pertenecen a hatos con menos de 10 animales y (como indican los datos del cuadro 7) que la oxiclozanida empleada como vermicida se administra al 0,6 $&. Sobre esta base, el costo nacional actual de los antihelmínticos administrados se- gún un régimen de cuatro dosis, apro- piado para el tratamiento de la fascioliasis aguda en los caprinos, se puede estimar en aproximadamente J$ ll 600..

Como se señala en el cuadro 8, parece razonable estimar el costo total actual del tratamiento contra la fascioliasis en los ovinos en unos J$ 1 300. Sin embargo, hay ciertos indicios de que se prefiere la rafoxanida, el fármaco más usado, fun- damentalmente por su actividad contra el rezno de Oestms oti (35).

Pérdidas actuales y pretitas

(13)

CUADRO 7-Porcentajes de vacunos, caprinos y ovinos de Jamaica que recibieron antíhelmínticos activos contra F. hepatica, y costo medio de los diversos fármacos admi- nistrados.

‘% de animales en el paIs que recibieron los siguientes fármacos:

No de granjas Cualquier

Tipo de Tamaño del incluidas en Oxiclosanidaa Albendazolb Rafoxanidac vermicida

ganado rebaño la encuesta % % % %

I-10 animales 162 ‘3,6 o,o o,o Os6

ll-50 animales 82 5,o o,o 1,25 635

Vacunos > 50 animales 20 10,o

5-0 o,o 15,0

Costo por dosis J$ 5.69 J$ 647 J$ l-89

l-10 animales 161 ‘3,6 o,o o,o 096

1 l-50 animales 46 04 2.2 4.3 63

Caprinos > 50 animales 8 12.5 12,5

0.0 25.0 Costo por dosis JS 0391 J$ 1,62 J$ 0.31

l-10 animales 18 04 0-0 o,o o,o

1 l-50 animales 18 536 o,o 22.2 27,s

Ovinos > 50 animales 9

o,o ll,1 o,o ll,1

Costo por dosis J$ 0991 J$ 1362 J$ 0931 ’ 3% de oxiclosanida. 1.5% de levamisol (NiIzan; Imperial Chemical Industries, Ltd.). b 2,5-10% de albendazol (Valbazen; SmithkIine Animal Health, Ltd.).

= 2.3% de rafoxanida @anide; Merck. Sharp, and Dahme, Ltd.). De acuerdo con lo indicado, se calcula que

el costo económico total de la enfermedad es de alrededor de J$2 400 000. Sin em- bargo, hay que señalar que las mejoras proyectadas en relación con la productivi- dad de la industria lechera y el control más estricto de los procedimientos de inspec- ción de la carne, podrían elevar la pérdida prevista a J$ 3 200 000. Estas estimaciones no incluyen un aumento concomitante de las cabezas de ganado en el país o de la producción de carne, ni los costos posible- mente mayores como consecuencia de la mortalidad, de la menor calidad de los animales faenados y de la necesidad de ser- vicios para la atención de la salud animal. Por otra parte, aun cuando en este estudio no se ha asignado un valor especial a las di- visas, es indudable que una proporción considerable de las pérdidas estimadas implican egreso de divisas, ya que estas de- ben emplearse para adquirir antihelmínti- cos y forraje e importar sustitutos de la car- ne y productos lácteos para el consumo in- temo.

Consideraciones en relación con la salud pública

No se han registrado casos de fascioliasis humana en Jamaica, pero se sabe que se produce la infección zoonótica en Cuba, Puerto Rico y la República Dominicana. La prevalencia de la fascioliasis humana en el norte del Caribe y la mortalidad que provoca no han sido cuantificadas en for- ma adecuada, si bien existen datos que in- dican que los registros de los casos mani- fiestos subestiman la prevalencia de las in- fecciones subclínicas. Así, en una sola clínica cubana se observaron 27 casos clínicamente evidentes en un período de tres anos, 1973 a 1976 (9), y una encuesta reciente que incluyó a 184 sujetos asinto- máticos de una región endémica de Puerto Rico, reveló la presencia de huevos de Fas- ciola hepatica en las deposiciones del 7,1 y0 de esos sujetos (10).

(14)

CUADRO 8-Gastos actuales en fármacos para combatir la fascioliasis en va. cunos y ovinos en Jamaica.

Tamaño del rebaño

(ND de animales) Costo total l-10 Il-50 > 50 (en miles de J$) Gastos correspondientes a los vacwzos:

No de granjas > 0,4 hectáreas No medio de vacunos por granja Costo de los antihelmínticos, 3 dosis

por animal tratado por año (en miles de J$):

oxiclosanida albendarol mfoxanida Total

134 620 700 295 0.80 29,s 514.3

Costo por cabeza (eti miles de J$)

14,2 22.9 328,5 60 0,o 193 1 0,o 2,0 0,o

14,2 24,9 521,6 560,7 0,21 1.86 5,33

83 23 9

2,65 24,0 160,l

0,o 0,l 0.0 0,o 0,o 1,o 0,o 0,2 0,o

0,o 0.3 1,o 1.3

o,o 0,48 0,72 Gastos correspondientes a las ovejas:

No de granjas

N” medio de ovejas por granja Costo de los antihehnínticos, 4 dosis

por animal tratado por año (en miles de J$):

oxiclosanida albendazol rafoxanida Total

Costo por cabeza (en miles de J$) a Fuente: (17)

en la región del Caribe es una función de los modelos locales de alimentación, los cuales pueden en sí reflejar los diferentes orígenes étnicos de la población de la isla (36). Sin embargo, esta explicación dista de ser satisfactoria ya que cambios en las técnicas de irrigación, en particular en lo que se refiere a la irrigación de las verdu- ras utilizadas en ensaladas, podrían ser causa de la enfermedad humana en Ja- maica, con los consiguientes costos sociales y económicos.

Conclusiones

El estudio que comunicamos aquí ha de- mostrado que la fascioliasis es endémica en Jamaica por debajo de los 500 m de alti-

tud, y que presenta prevalencias y grados de intensidad que reducen la productivi- dad del ganado. Se ha estimado el costo económico de este efecto, que es propor- cional a las dimensiones y a la eficiencia de las actividades ganaderas, *en relación con la producción ganadera y el número de ca- bezas que existen en la actualidad. Por consiguiente, el crecimiento de la produc- tividad y del número de animales aumen- tará las pérdidas económicas absolutas causadas por esta enfermedad. La impor- tancia de esto se vuelve evidente al consi- derar dos medidas propuestas en relación con la industria ganadera jamaiquina.

(15)

CUADRO g-Resumen de las pérdidas econó. micas estimadas, que causa la fascioliasis en Ja- maica.

Pérdtdas dzrectas

Costo (en JS) Costo Costo actual proyectado

Decomiso de vísceras comestibles

Producción láctea inferior a la óptima

Producción cárnica inferior a la óptima

286 300 849 000 680 000 910 000 825 000 825 000 Pérdzdas zndwectas:

Costo de los antihelmínticos 573 600 573 600 Pérdidas totales 2 364 900 3 157 600

entre 1948 y 1976, fue acompañada de un aumento en la prevalencia de la fas- cioliasis, que se elevó de 7,5 a 31,7oJ, (5, 6); ahora la enfermedad está próxima a convertirse en hiperendémica (10, 37). Las pérdidas económicas directas causadas por el decomiso de hígado vacuno se decupli- caron durante el mismo período (5, 7). El aumento del ganado lechero en Jamaica podría tener secuelas perjudiciales seme- jantes.

En segundo lugar, se ha propuesto rees- tablecer una industria ovina con rebaños de las razas Barbados Black-Belly o St. Eli- zabeth. Sin embargo, es preciso tener en cuenta que los efectos perjudiciales de la fascioliasis aguda en los rebaños de ovinos son mucho más graves que los de la fas- cioliasis crónica en el ganado vacuno (38). Las actuales pérdidas insignificantes que causa la fascioliasis ovina en Jamaica refle- jan el escaso número de cabezas de ese ga- nado; una expansión imprudente podría convertir la cría de ovejas en la principal fuente de pérdidas producidas por la en- fermedad.

Para evitar que aumenten esas pérdi- das, el desarrollo de la ganadería debe ir

acompañado de una estrategia para com- batir la fascioliasis, adecuada a las condi- ciones locales. Los actuales métodos para proteger la salud animal, basados en tra- tamientos terapéuticos y de recuperación, son ineficaces y costosos y no contribuyen a combatir la incidencia de la infección. Además, las estrategias de lucha resultan más eficaces con relación al costo que los tratamientos esporádicos, ya que limitan el empleo de tratamientos a los períodos y localidades en que es mayor el riesgo y utilizan técnicas de ordenación pecuaria para disminuir la incidencia de la infec- ción. Esta metodología es conveniente, en particular, en los países en desarrollo pues reduce al mínimo los gastos en antihelmínticos y, Por consiguiente, contribuye a la preservación de las escasas divisas.

Resumen

En este estudio se intenta cuantificar las repercusiones de la fascioliasis en la salud animal, la salud pública veterinaria y la economía de Jamaica. Una encuesta co- prológica efectuada con este propósito a fí- nes de 1979 y a comienzos de 1980, reveló una prevalencia general de la fascioliasis de no menos del 22,2a/, (n = 520) en los va- cunos y del 17,2%, (n=514) en los capri- nos. En general, la prevalencia de la enfer- medad se vinculaba directamente con la precipitación pluvial y estaba en relación inversa con la altitud. Se identificaron cuatro zonas ecológicas de la endemicidad y se estableció su asociación con la epidemiología del huésped intermediario, Fossaria cu bensis.

(16)

(provocadas por los gastos de tratamiento). La estimación no incluyó costos menos cuantificables asociados con la mortali- dad, el suministro de servicios veterinarios y oportunidades perdidas. El costo econó- mico total de la fascioliasis en Jamaica, co- mo lo indican los datos anteriores, parece llegar a unos J$ 2,4 millones (J$ 1,78 = US$ 1,OO); si se consideran también los incrementos previstos en la ganadería de Jamaica, ese total se eleva a J$ 3,2 millo-

nes. Merece destacarse que una propor- ción importante de este costo absorberá las escasas divisas, que se destinarán a ad- quirir fármacos y sustitutos importados de la carne y productos lácteos para el consu- mo interno.

También es preciso recordar que la fas- cioliasis es una zoonosis que produce canti- dades significativas de casos humanos en las Grandes Antillas, y que modificaciones inadecuadas de los métodos de cultivo de hortalizas podrían convertir la enfermedad en un problema importante para la salud del hombre en Jamaica.

Por último, existe un verdadero riesgo de que el crecimiento proyectado del ga- nado vacuno y ovino de Jamaica aumente enormemente la prevalencia de la enfer-

medad, como ha sucedido en otras partes. En consecuencia, se recomienda que el de- sarrollo de la ganadería nacional vaya acompañado de una apropiada estrategia de lucha contra la fascioliasis. Una estrate- gia para combatir la fascioliasis que sea eficaz en relación con el costo, limitará el empleo de tratamientos a los períodos y lu- gares en que sea mayor el riesgo y utilizará técnicas de ordenación pecuaria para dis- minuir la incidencia de la infección. n

Agradecimiento

Deseamos agradecer alpersonal de la Divi- sión de Veterinaria del Ministerio de Agricul- tura su valiosísima colaboración durante la re- alización de la encuesta descrita en este traba- jo., También expresamos nuestro reconoci- miento a la Unidad de Planificación Económi- ca (Sección de Administración de la Explota- ción Agropecuaria), al Banco de Datos y Uni- dad de Evaluación, y al Departamento de In- vestigación y Desarrollo del Ministerio de Agri- cultura, que generosamente nos permitieron consultar sus amplios registros estadísticos sobre la industria pecuaria de Jamaica. La dis- cusión abierta con procesadores del sector pri- vado de la industria lechera, en particular con United Dairy Farmers Ltd. y Cremo Ltd., faci- litaron mucho nuestra labor.

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(18)

Fascioliasis in Jamaica: Epidemiologic and economic aspects of a snail-borne parasitic zoonosis (Summary)

This study attempts to quantify the animal health, veterinary public health, and economic impact of fascioliasis in Jamaica. A coprologic survey conducted for this purpose in late 1979 and early 1980 revealed on overa11 fascioliasis prevalence of at least 22,2oJ, (n = 520) in cattle and 17,2% (n = 514) in goats. In general, the prevalence of the disease was found to be directly correlated with rainfall and inversely correlated with altitude. Four ecological zones of endemicity were identified and related to the epidemiology of the intermediate host,

Fossak cubensk

The economic cosí of the disease was estimated from production statistics and a questionnaire survey. Losses were categorized as being either direct (due mainly to liver condemnation and suboptimal dairy or beef production) or indirect (due mainly to treatment costs). The estimate did not include the less quantifiable costs associated with mortality, provision of veterinary services, and lost opportunities for development. The total economic cost of fascioliasis in Jamaica, as indicated by the above data, appears to be of the order of J$ 2,4 million (J$ 1,78 = US$ 1 ,OO); and if anticipated improvements in

Jamaica’s livestock industry are allowed for, this total rises to J$ 3,2 million. It is noteworthy that a significant share of this cost would be in scarce foreign exchange spent on drugs and on imported substitutes for local meat and dairy products.

It should also be recalled that fascioliasis is a zoonosis producing significant numbers of human cases in the Greater Antilles, and that inappropriate changes in vegetable cultivation practices could cause it to become a significant human health problem in Jamaica.

Finally, there is a very real danger that proposed increases in Jamaica’s cattle and sheep herds could enormously increase the prevalence of the disease, as has happened elsewhere. It is therefore recommended that development of the country’s livestock industry be accompanied by development of an appropriate fascioliasis control strategy. Such a planned approach to fascioliasis control, which tends to be relatively cost-effective, confines treatment to the periods and localities at greatest risk and uses animal management techniques to reduce the incidence of infection.

A fasciolíase na Jamaica: Aspectos epidemiológicos e econômicos de urna zoonose parasitáría transmitida pelos caramujos (Resumo)

No presente estudo tenta-se quantificar as repercussóes da fasciolíase na saíide animal, na saúde pública veterinaria e no impacto econômico que causa na Jamaica. Um levantamento coprológico efetuado com esse mesmo objetivo no fim de 1979 e no principio de 1980 revelou urna prevalência geral de fasciolíase de não menos de 22,2 % (n = 520) no gado vacum e de 17,2yo (n=514) nos’ caprinos. En geral a prevalência da infestacão vinculava-se diretamente com a precipitacáo pluvial e estava em relacão inversa com a altitude. Identificaram-se quatro zonas ecológicas da endemicidade e estabeleceu-se sua associacão com a epidemiologia do hospedeiro intennediário - Fossaria cubensis.

Estimou-se o custo económico da doenca a

(19)

da pecuárja da Jamaica esse total sobe a J$ 32 milhões. E digno de nota observar que urna parcela significativa desse custo seria em escassas divisas estrangeiras gastas na importacão de medicamentos e substitutos dos produtos de carne e laticínios para o consumo nacional.

Deveriamos recordar também que a fasciolíase e urna zoonose que produz números significativos de casos em humanos nas Grandes Antilhas e que as mudancas não adequadas nos hábitos e costumes adotados na lavoura para a cultura das verduras e legumes poderia até fazer que essa infestacáo se tornasse um sério problema de saúde humana na Jamaica.

Em conclusão, há um perigo muito real de que os aumentos propostos de rebanhos de bovinos e caprinos na Jamaica poderiam aumentar enormemente a prevalência da doenca como já aconteceu em outras partes. Portanto se recomenda que o desenvolvimento da industria da pecuária do país seja acompanhado de urna estratégia adequada para o controle da fasciolíase. Um enfoque bem planejado para o controle da fasciolíase tende a ser relativamente de custo efetivo, confina o tratamento a períodos e localidades de maior risco e emprega as técnicas de manejo dos animais de tal maneira que possa reduzir a incidencia da infeccão.

La fasciolase en Jamtiique: Aspects épidémiologiques et économiques d’une zoonose parasítaire transmise par les escargots (Résumé)

L’objet de cette étude est l’évaluation quantitative des répercussions de la fasciolase sur la santé animale, la santé publique vétérinaire et l’économie de la Jamaïque. La recherche coprologique effectuée dans ce but a la fin de 1979 et début de 1980, a révélé une prévalence générale de la fasciolase de 22,2 % (n = 520) au moins en ce qui concerne le gros bétail, et de 17,211, (n = 514) par-mi les espèces caprines. Il a été observé qu’en général il existait un rapport direct entre les précipitations atmosphériques et la maladie, mais un rapport inverse entre celle-ci et l’altitude. Quatre zones écologiques d’endémicité ont été identifiées et il a été établi que la contamination y est associée à l’épidémiologie de l’hôte intermédiarie,

Fossaria cubensis.

Le co& économique de la maladie a été calculé sur la base de données statistiques de la production et de celles fournies par une enquête menée au moyen de questionnaires. Les pertes ont été classées en pertes directes (causées essentiellement par la confiscation de foie et une production de lait ou de viande de qualité inférieure) et pertes indirectes (correspondant aux frais de traitement). Dans ce calcul il n’a pas été tenu compte de coûts moins quantifiables associés a la mortalité, aux soins donnés par les services vétérinaires et à la frustration de possibilités. Selon les données antérieures, le cout économique total de la

fasciolase en Jamaique semble etre de l’ordre de J$ 2,4 millions (J$ 1,78 = US$ l,OO), et compte tenu de l’augmentation evisagée de l’élevage à la Jamaique, ce total s’élève à J$ 3,2 millions. Il y a lieu de dire qu’une importante proportion du coût occasionné par la maladie absorbera les quelques ressources disponibles en devises destinées à l’achat de médicaments et à l’importation de viande et de produits lactés destinés à la consommation nationale.

Il y a lieu également de signaler que la fasciolase est una zoonose qui occasionne de nombreux cas de maladies parmi les humains dans les Grandes Antilles et que des changements impropres introduits dans les méthodes de cultures maraichères pourraient convertir la maladie en un probleme grave pour la santé humaine en Jamaique.

Imagem

CUADRO  l-Número  de  vacunos,  caprinos  y  ovinos  incluidos  en  la  encues-  ta;  cantidad  estimada  de  cabezas  de  los  respectivos  ganados  en  todo  el  país;
FIGURA  2-Datos  que  indican  la  presencia  de  infección  con  F,  hepatica  en  los  municipios  de  Jamaica
FIGURA  3-Relación  entre  la  precipitación  y  la  altitud  de  la  granja,  y  la  preva-  lencia  de  fascioliasis  entre  el  ganado  caprino  v  vacuno
CUADRO  a-porcentajes  de  granjas  que  criaban  vacunos  y  caprinos  infectados  con  fascioliasis,  a di
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