Mayo 19491 DDT 481
EMPLEO DEL DDT
(Declaración conjunta de especialistas en el uso de insecticidas) En abril del corriente año, se celebró en Washington una reunión a la que asistieron representantes de varias agencias del Gobierno de Estados Unidos y de la Oficina Sanitaria Panamericana.
La resolución que se da a continuación fué adoptada por especialistas de las Oficinas: de Industria Animal, Lechera y Entomología y Cuarentena de Plantas, y División de Insecticidas del Departamento de Agricultura; del Cirujano General, del Departamento del Ejército; del Servicio de Sanidad Pública, Administradde Alimentos y Drogas, de la Agencia Federal de Seguridad; de Medicina y Cirugía, del Departamento de la Marina, y un técnico de la Oficina Sanitaria Panamericana:
Ultimamente se ha dado publicidad a ciertos conceptos que han originado malas interpretaciones a la vez que alarmado la opinión pública en cuanto a los peligros del empleo del DDT como insecticida.
El DDT es un insecticida muy valioso que ha contribuido considerablemente al bienestar dela humanidad. Se ha empleado con gran éxito, tanto en el control como en la prevención de enfermedades transmitidas por insectos, como el paludismo y el tifo, e igualmente en la exterminación de insectos destructores de cosechas, perjudiciales al ganado y que infestan las viviendas.
Se ha reconocido plenamente que el DDT, al igual que otros insecticidas, es un veneno, hecho que se ha estudiado cuidadosamente al recomendar su uso. Sin embargo, no esisten pruebas de que el empleo del DDT, si se observan las instrucciones de las diferentes agencias federales, haya orginado jamás enfer- medad alguna, a pesar de que durante los últimos cuatro o cinco años se han usado miles de toneladas anuales tanto en las viviendas como en la protección de las cosechas y de los animales. Sin embargo, el kerosene y otros disolventes utilizados con el DDT y con casi todos los demás insecticidas, sí pueden producir síntomas tórdcos leves.
La declaración respecto a que el DDT es responsable de la llamada “enfer- medad de virus X” del hombre, y “enfermedad X” del ganado, carece absolu- tamente de fundamento. Ambas enfermedades habían sido ya identificadas con anterioriclacl al empleo del DDT como insecticida.
La Administración de Drogas y Alimentos no ha prohibido el empleo del DDT en pulverizaciones para el ganado lechero y los corrales. La Ley Federal sobre Alimentos, Drogas y Cosméticos, ‘solicitó de la Administración de Alientos y Drogas la seguridad de que el abastecimiento de alimentos del pueblo estadouni- dense no contendrá substancias venenosas y deletéreas que no sean indispensa- bles para su producción. Los estudios realizados por la Oficina de Entomología y Cuarentena de Plantas han demostrado que el DDT, aplicado al ganado o contenido en el forraje, puede aparecer en la leche en pequeñas cantidades, e igualmente cuando se ha empleado en forma corriente en los corrales, como insecticida contra las moscas. Debido a la importancia vital de la leche como alimento infantil y de individuos de todas las edades, es de la mayor importancia que se tomen las precauciones debidas para protegerla. La modificación de las recomendaciones hechas por el Departamento de Agricultura sobre el empleo del DDT en el ganado lechero, fueron hechas simplemente como medida de precaución.