La
escritura
de
la
memoria
Libros
para
la
administración
IX
Jornadas
de
la
Sociedad Española
de
Ciencias y Técnicas
Historiográficas
(Vitoria-Gasteiz,23
y
24
de
junio
de
2011)
Editoresi
José
Antonio Munita Loinaz
José
Ángel
Lema PueyoUniversldad EuskalHerriko
del País
Vasco
uniberisitaieaARCITALPEN
ZERBTTZUA
C I P. Bibli oteca Uúir e ts i taria
Sociedad kpañola de Ciencia§
I
Técnic¡s Histo.iognáficrs. Jomad¡s (9.' 2011. Vito a'Gasteiz)li
es.rilura de la ne¡nona: Librcs paÉ la adminisiEción : IX Jormdas de la S@iedadEspañola de Ciencias y Técnicas Hisloriográficas (Viloria,Gasteiz, 23 y 2,1 de junio de
2011) / editores, José Antonio Munia l¡i¡az, Iosé Ángel
t
maPueyo
Bilbao : Uni, lcmidad del País Yasco / Euskal Heriko Unibe.lsilatea. A.silálpen Z¿rbitzu¡ = Servi.io Editorial, D.L.2012.
370 p- : il-, grlf. I 24cn.-
(Hirtoiia Medieval y Modemá)D.L.: BI-
l-793'2012
ISBN: 978-84-9860 722 2l. PaleogÉfíá
-
Congresos- 2. HistorioSÉfía-
Con8resos. l. Munita Loinaz, JoséAnronio,
od.lit.
II. bma Puelo,JGéArgel, ed.lil930.2't21063) 930.r(063)
Fon) de pórtádrAzalarcn g¿kia: Librc de Cuentú del mo¡aste¡io de Sd Clemente de
Selillá del año 1505. Arch. Mon. San Clemenle. se. l.',log. I0, ¡úñ. 54ó. Reproduc-ción sory¡da por el piopio archivo
O
Señicio Editori¡l de IaUniveBidad de1 PaísVs@ Euskal Heriko U¡iberrsitaleko Argitalpen Z. rbilz@ ISBN: 978 84-9860 722 2Estudio
diplomático
dcl
primer libro
de
remates
de
rentas
de
la Iglesia
de
Oviedo
(1448-1459)
Néstor VrGrL MoNrESrLINrvr$rD^D DL OvlEDo
l.
Introducción.
;.Quésor
Ioslibros
de remates de rentas?Los
libros de
rcmatesde
rentas son unatipología de libros de
gestión económica delpatrimonio
delos
cabildos catedmlicios, que contienenla
infbrmación
básica de los contratos deforo y
de las eventuales modificacionesa las qüe estaban sujetos, como el cambio de foratarios a través del mecanis-mo de renuncia.
o
el cambio de fiadores. Eslos contratos, que songestiona-dos directamente por la
i¡stitución
capitular, son rematados en el ganador deuna subasta. de
lo
que deriva el nombre del instrumento archivístico encues-tión.
Sin embargo. la acción de rematalla
renta apenas aparece mencionadaen los asientos, ya que se sobrentiende que para otorgar el
tbro
se ha efecaua,do antes un remate,
y
menos aún el proceso de subasta, que sí aparece en las actas capitula.es compuestopor
varios pregonese¡
Ios que se iban aumen-tando las pujas hasta rematar la renta.Esaa
tipología
tiene sri origen enla
restructu¡ación dela
producciónes-critururia del cabildo, que coincide con la recuperaciírn económica de
la
de-cimoquint¿r
centuria
y
el
aumento exponel1cial de nuevos contratos deex,
plotaciónpatrimonial,
así como de sucesivas alteraciones delos
mismos encortos periodos de
tiempo.
Esto supone que.difícilmente,
elcabildo pudie,
ra continuar controlando conlapidez
a los destinatarios de cada una cle sus posesiones a través de los originales sueltos. Tampoco ot.os libros de gestión económica eran adecuados para dichofin.
Los Libros
dc Regla (Kalendas), vigentes desdeel
siglo
xr]]2.sólo
eran eficaces paracontro:ar
cuáles eranlas rentas percibidas en coilcepto del aniversario de ..n día
co.creto
del año, peropol
Iafalta
de espacio se volvíaÍ] caóticos para un seguimiento administssle est dio ha sido posiblo lmci¿s al disf¡ute de una beca de Form¿cnin dcl Prol¡sorn
do UniveNilario dcl Ministcrio ds Educación (A1,2008-0ar.l3).
2 lioDRicrrEz Vn LAR. Víctor Manucl: Líbrc de Re3kl d¿l cub¡!¿o (KuL¿n¿ut l),
ñü¿io
t
16.1 NÉst0R vlctLMoNt Es
trativo
de la propiedad. Con la aparición de los libros de remates, los[otalios
dejaron de realizar ese rastreo a través de los l-ibros de Regla.Por
lo
tanto.los libros
de rcmates de rerltasfueron
lasolución
más efi ciente parael control
delos
pe.ceptores dela
propiedad capiaulary
de los canónigos que actúan comofiadolcs.
su cspecializacióny palticular
disposi ción de lainformación
sobre los contratos. permitc cotejar iápidamente quiénes son los actuales usufructuarios de
los últimos
bienes aforados y, asimisño.
los cljferenles cambios de manos quetuvieron
en el pasado reciente.2.
El
primer libro
de remates dercrtas
(1.148-f459)El
objeto de nuestro estudio seráel primer
libro
de Rem¿1es de Rentasde la Catedral de Oviedo. que se conserva en su
Archivo Capitular y
que seregistra en
el lnventario
fudicedel
papel manlLscritodel dicho
archivos.Un
documento que ha pasado desapercibido tanto para los agentes de ladesamor-tizariórl,
que[o
lo
trasladaron aMadrid
por lo
que noformó
pa.te de la documentaciónhoy
conservada enel Archivo Histórico
Nacional-,
como paralos
investigadores, que nuncalo
han citado. Sin embargo, es urla fuen te histórica degra¡ utilidad
para conocer la estructuru económica del cabildo catedralicio deOyiedo
a mediados dela
decimoquintace[turia. en
un mo-mentocmcial
de su historia, ya que en él creció el número dereltas
percibi-das de
tal
m.lnera que se pudo impulsar la tarea de construir una nueva cate-dral de factura gótica.Se trata de un
libro
que en su actual estado conserva un total de 235fo
lios. dis¡ribuidos
en nueve cuademillos, que co.aienen entradas que cubren!n
per'iodo de once años, situado entrefeblero
cle i"148y
cliciembre de 1459. Por consiguiente, la cronologíade
l45l
a
I456qrefiguraenel
citadoinven-talio
es errónea, ya que copia literalmente la qse consta en Iacubie(a
en pergar':iro
del propiolibro,
escrita con una humaÍrística del siglo xvrn.La
e¡cuadernacióndel lib¡o
es b¿rsaante caóticay
existeun
desorden enla
posición delos cuadcmilios,
plobablementa por]a
descuidada actuaciundel
artesanoal
que
sele e.comendó la
tarea de coserfbrmando un
único bloque losdiferertes
cuade¡nillos en los que sefue
escriLriendo los asientos.hcluso
encontramos una doblenumer¿ció.
romanaj una tachada que pode mosdefinir
como original, ya que
sigueel orden cronológico;
y
otra
que serjusta al orden
de cncuadernacióny
que tambiénfue
[ealizada duranteel siglo
xv.
La numeració¡ originai
que se conserva. comienza enel
cuarto cuadernillo
enel
lolio
2.1y continra
hastael
final
del
libro
alcanzandor
El docu¡n!¡to ligura con la signatura: Archilo Capitular dcmcn sin scri¡r. l-ibro 293. Rcmalcs dc Rcntas (1451 1456). cnARGs pel
n¡d
st:t¡to ¿el Ak:hiro Capituldr ¿e Ot,iedo (I¡trc¡útflo Indk\!). p. 12f3.Orjcdo. Papel cD \
du
IrlL Var r.F. R.1ú| El pd RIDEA- Ovicdo. I991:
F-SrL DIar JI ¡-OIV1-{TICO DEL I'RI\1ER LIts RO DE REM,{IES DE RE\1AS DE 1-A laiLLSlA. . 165
e¡
folio
216, después existe una Iaguna entre losfolios
217y
240, para reto-¡':arse enel primer cuadernillo
hasta llegar aliolio
262,y
desaparecer en elsegundo y tercer cuadernillo. La nume¡ación
cile
se ajusta al orden de encuadernación comienza con el
lblio
I
y termjnaco¡
el 235, estosignifica
que notiene
lagulas,
y podemos llegar a la conclxsión de qLlc sstamos anae el'¡ate
rial
superviviente entre su elaboracióny
su encuacle¡nacióndelinitiva
con un pergamino reaprovechado que pertenecía a un calenciario.Pero los
fallos
adveñidos no selimitan
a la tarea de ordcnar cuadernillos.y
se pueden encontrar también en la colocación de losbifolios
dentro de los cr:adernillos; esel
casodel
bifolio
exte.ior del primer cuadernillo,
que ha sido colocado deforma
inversa a suinicial
situación, porio
que los actualesfolios
I
y 22 están inte.cambiados.'lbdo ello
suponela preselcia
de un desbarajuste cronológico, percepti-ble en los tres primeros cuadernillos:el
primero debe¡ía serel
que finalizara el libro, ya que srLs asientos se datan en los años 1458y
t459, mientras que elsegundo correspondería al primero. debido a que sus datas son de 1448.
nie¡
tras que
lo
ocrrrido con el
tercercuadernillo
es más comprensible, porquepeÉenece a otro escribano,
y
si respetásemos el orden cronológico, como estáfeciado
en
1450. deberíair
i¡tercalado en el cuarto cuademillo. Precisamen-te, en ese cuafto es donde se detiene este caos. pudiendo corNtatarse una con-tinuidad cronológica hasta elfinal
dellibro
desde 1149 hasfa 1451.Está
claro
queel
libro,
o el
proygcto derealizar un libro. tuviera
masfolios y
las nuevas entradas abarcasen una cronologí¿ lige¡amente más amplia.
Al
menos se puede constatarla falta de los primeros
23folios
segirnla numelació¡ original, si
bienpor el
ordencrolológico
se puedeconside-rar
que dentro de esa pérdida el,Ilraríanlos
l9lolios
sin
numerar del actual segundocuademillo. aulque
tod¿vÍafaitaría.
ot.os
4 iolios
más en donde tendría quefigurar
rfi
¡nc¡p¡t rlellibro. Tambiél
debería de cubrirse la lagu-na existente entre elfolio
217y el
24O dela
numeracióno
ginal,
con unoo
varios cuadernillos,los
asientos realizados entre mayo de 1457y abril
de1458.
Sin
embargo. sospechamos quela cronología
final
sÍ
se ajustaa lo
conservado,ya
que el,Ie] primer cuadernillo,
que coraesponderiaal último,
velflos como sefeaprovecha¡
espacios para meter e¡tradas que no tuvieron hueco en ellibro.
Además
el
lib.o
estuvo vigente durante ias siguientes dos décadas, por que encontramos asientos de las modificaciones de contratos anteriores con una cronología que alcanza llasta septiembrede
1478. Fecha enla
que fue reemplazaclo por otrolibro
de remates daaadoent.e
1478y
1486, que hade-saparecido pero es mencionado en
el «Libro
Maestro» del archivo capitular, un inventario delsislo
xv¡rl.
a Archlvo (l.rpirular dc Oricdo- I,atrcl cn lolumc. scri¡rdo. Lihro Macslro dc rod.s los ])c¡. Saminos y papeles quc se hallan cn el Archi!o dc la Sanra Iglcsia dc O!icdo, tomo l. p. { 13.
166 \EsroR vtctLMo)i tl,s
3.
Organizaci(in
de lt¡s asientos en ellibro
La regla fundamental qlte sigue la disposición de los ¿sientos en este
libro
es que a cada propicdad Ie cortespo¡de toda una plana, para asÍ podcr cscritu-mr dcbaio
dcl
asientoorigi.al
las sucesivasmodificacio.es
del contrato. Por consiguicnte, cada vez que el cabildo catedralicio rematase un nuevocortlato
de
foro o
modificase un contrato vigente, si la propiedad afectada no tuviese un¿ planaen
donde se hubieran asentado contratos anteriores. automática mente pasa a se[ una nueva entrada dellibro
de remates de rentasy
ocuparía la primera plana vacía. en la cual se deja espaciolibre
para eventuales altera ciones. En el caso de que sí existiela un co¡1rato anter'ror, el nuevo contfato seasentaría a
cortiruación
de la úitima modiflcación que tuviese la entmda Sin embargo, a loda norma general le siguen las excepciones, porlo
q.!een
el libro
tenemos entradas que ocupan dos o más planas y, asimismo.pla-nas en las que aparecen clos entladas quc tmtan sobre dife.entes prop:edadcs.
Las entradas que ocupar
vürirs
platr¿s no suelen se¡ hal¡itualesde¡t¡o
dellibro, y
corresponden acon¡atos
cuya complejidad, o el hecho de que hayansido
realizadospor otro notario difcrente
al
que estáesclibiendo
habitual mente enel libÍo,
plovoca la nccesidad de que te¡gan que ser redactados in-tegramente.y
de incorporar inserlos de contratos relacionados. Sólo existen dos ejemplos dentto de nuestrolibro
de rentas: elforo
de un cellero que t'ueoriginalmente redactado por el notado apostólico Pedro Núñez. pero que en
el
libro
está asentado con manodcl
notario episcopa: Juan Perrández, porlo
que se transcribe íntegralnentey
se inserta un pocfer dado por ellbratario
al leprese¡tante que negocia con el cabildo(3v
3r):y
Ia renuncia delfolo
de unpontazgo en ta que se
itcluye
el
rematea:
anteriorfomtario
(121v-122r'1, eincluso se dejó
la
siguiente plana en blanco para futuras a teraciones que síse produjeron (122y).
El
casocontrario,
el
de
dos entradas oon diferentes asuntosocuptndo
una misma cara, tampoco es demasiado fiecuente.y
parece darse sólo cuando existe una necesidad de espacio dentro
dcl libro.
Esto sucede en unanue-va entrada que no tenía espacio den:ro del
último
cuadernillo (segÍtn el orden cronológico),y
quetuvo
que aser.l:arse debajo delúltimo
asiento del año an-terior, pasando aconve(irse
asi enel primer
asiento de ese año(l
lv).
Perolo
más habitual es que sean asientos que no tengan espaciolible
en su entrada corresponcliente. por
lo
que la¡ueva modificación
se asienta en elprime.
hueco que haya a continuación en las siguicntcs planas, aunque tenganot.a
e,rt.ada dedicada a una propiedad diierente. Un curioso ejemplo es la entrada sobre
el
lbro
del
pontazgo deOlloniego (36r),
cuyas sucesivas alteraciones provocan que se complete su planaoriginal y
quela última modificación
seasiente en la siguiente plana (36v.), compartiendo de este modo espacio con otro
foro
diferente, porello
el ercargado de realizar laílltima
altelaciónta:¡
bién escribiri una nota alfi.al
de la planaoriginal
que adviefte del fenómenoen los siguientes télit:rinos:
Organización de los asientos en el
libro
v
\)
\) 4
Asiento con un contrato
de una propiedad ncl
registrada, se asienta en la
primera cara en blanco.
Se deia en blanco la parte inferior del folio,
reservada para posteriores
modificaciones del contrato §
\
§ !J ! §) v §.) nPrimer contrato asentado
en una plana vacÍa
Asiento con una rnodificación sobre el
¡rrimer contrato, se asienta
deba.io de éste
Se sigue dejando espacio en blanco para futuras modificaciones del contrato
l6[,i NEsloR \,la;ll, MON fl--s
Un
caso excepcional de planaen
la queconviven
clos asientos dediie
rente natu.aleza es el de dos contratos sobre dos inmueblcs que están anexosy que los afora la misma persona (34r). por lo que pode¡ros considerar que el
cabildo, a elec:os ¿]ch
nistrativos,;o
va a tomar como una misma propiedad, aunquc cada uÍ]a sca il1dcpcrdicnte con dife¡entes fiadores.4.
Estructura interna
de los asientosEl
siguiente paso de nuestro an¿ilisis será el de analizar los tres elementos de los que se conpone un asiento con'rpleto: el epígra1'e, el textoy
'as
Írbticas.
El primer elet
eDto que sefija
es el epíglafe (encontra.ros asientos don de sólo figura este elemento), situado en la pa.te superior del asiento a modo detÍtulo,
conteniendo los datosidentificativos
delcolíato
palai'acilitar
elpos-terior
proceso de búsqueda clentrodel libro
enel archivo.
algo l'undamentalpara un :nstrumento de
ad
!nist,ación.
l,os
epÍgrales cotrespondientes alprimer asier:o
de cada eniratla puedenteler
ulla división
de hasta tres co-lumnas. queel
escriba¡ro realzadibuja[do
sencillos trazos para separarlas yasÍ poder señalar los
difere.tes iipos
deinformació¡.
Dentro de esta d:visióntripaÍita,
l¿ parle de la izquierda se reserva paraidel:ificar
al destina:ario delforo
a través dealgu
o de estos datos: nombre, apodo, posición en ei cabildo. profesión, luBar de mo!-ada. etc.;mientras que la parte de la de¡echa seutiliza
para recoger la cuantía
-en
direro
o enespecie-
a la que asciende la renta anual, que además, en algunos casos se especifica a qué partida va destinada (tabla, pan. aniversatias ü otras), e incluso puede desglosarse en dos partidasdit'erentes; finalmente es la parte central, en el texto, se describe Ia propiedad aforada incluyendo alguna de estas informaciones:
el tipo
de bien (casa, cellero,
renta, heredad, hórreo, etc.),la
ubicación geográficadel bieit, el
ante,rior lbratario
(«quesolía leuar
[nombre del anteriorforatafio]»), el
desrina, tario de la a¡ive¡saria (<quederó fnonbre
del destinatariol cn el co.billt'ytra
sLt
dn¡verktri.ttt),
gtc. Eyidentemente, los asientos quemodifican
aspectos delpdmer contrato, sólo contendráD aquellos datos que se
altera¡ y
novolvertn
a reiterar en la descripción del
bien-A
continuaci(in aparece el aexto del asiento. que ocupa todoel
aitcl-lo dela supeficie
de cscrituru. Generalmente suele ser breve, ya que se reduce alos
essential¡adel
negocio. es decir.los
datos variablesdel
mismo, aunque en ocasiones p[ede te,]er una rcdacción íntegra en la qr¡e se incluyalt todotipo
defórmulas
y
cláusrtlas comunes, que habitualmente seríanorlilidas,
pero que en ningún caso contiene los elementos validatorios del docümenk) nota rial. La redaccialn a rnodo de nota, también aparece en rcgistros y en los as:entos de actas capitulares,
y
al igual que en estos, seutiliza
üna redacción objetiva
en el que el s!.jeto escl
escribanoy
las paftes se prese¡'rtan como terceraspelsonas, apareciendo :os siguientes elementos: data crónica,
i[tituiación
del cabildoy
sudispositivo
(otorgamiento de un nuevoforo
o aceptación de unaHSTLDIO DIPI,OMATIC]O DHI- PRIMBR I,II]RO DI1 RH,MAI'I1S DIi RL,N'I'AS DIr I-A IGI-tsSIA... 169 o b0 \o
U9
thQo9
0J 'l-i aL) (r(d L;i§ü
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tr r-\ L¿i l) NI 0)lÉ
V q) \(§l ¡i o f-{¡ .t é) ¡r o (a q) (h v) é) li I tr u) I¡lll0
Ní,5lOR Vrcll,MON]tSre¡uncia
con el coDsiguiente nuevoforo.
con la dcscripción más o menosde-tallada
del
negocio),intitulación dcl foratario y
sudispositivo
(aceptación y nombrañicnao dc fiadores).Final¡nente.
el
asiento puede lematarse con varias rúbricas de diferentes bencficiados del cabildo, que actúan como fiadores del contlato; un elemento de validación que tiene vigencia sólo dentro de la legislación capitular. pero que es especialmenaeútil
parapoder
resarcirse .ápidamentede
una situa ción deirrpago
de la rentaa¡ua'
o rnral¡lta
de compromiso en las labores demante,rimiento
y
reparaci(in. Unas rúblicas que también pueden peúenecer alforatario,
si se tratase de un beneficiado de lainstitución,
ya llue en cstosca-sos e.jerce de principal dentro del elenco los liadores.
5.
Un
prodrcto
de la escribaníacapitular
La
redacciórr dellibro
de remates de rentas es e.comendada a Ia escriba-nÍa capitular, es decir, a laoflcina
en que desa¡ro:lan su labor como notarios con ca?acidad de darvalor público
a todoslos
actosjurídicos
dela
institu-ción.
Sumisión principal
esla
de elabolarlos
registros notarialesy
las ex-pediciones, pero tambiénvar
a elaborar los diferenteslibros
administrativos del cabildocated'alicio,
sierdocapÍt!lo
imporlante el preparar las actas capi-tulares o libros de acue.dos, memoriaarclivística
de todos los otorgamientos del cabildo. tanto ios que tienen uI1 carácte. público co]no aquellosmeramen-te internos. En la amplia variedad tipológica de los Iibros administrativos, los
libros
de remates de rentas entrarían dentro dela
documentación de gestión econórnicajunto
aiibros
de a¡iversarias. itlventarios de rentas,libros
deta
brica. etc.La
fuente fundamental dela
infolmaciól,I conterúda enlos libros
dere-mates de rentas, va a ser los diferentes asientos de las ac¡as
capit[lares
en ]os que aparccenlos otorgamieltos
sobre la cesjón delpatrimonio.
[JÍ]os asien-tosqle
en las actas aparecenco.
un escmpuloso ordenctonológico y
mez-cladoscol]
asuntos deotla Índole
(ordenanzas, mandatos, nombramientos. etc.), organización que no resultaba óptima para la gestión de estos contratos. Por tanto, se trasladaba el asiento de las actasal libro
de remates.y
se deja ba constancia en eilibro
de aclas detal
ltecl]o ntediante notas, que contienenla
abreviatura dela
palabra «aseltada»!y
aparecen enel
borde izquierdo oinfe¡io¡ del
ítem corespondiente del
acta.Una copia
cn la que
se adapta lainformación
a la estructxra dellibro
de remates, porlo
que ocupará Ia pri mera plana vacía si trata sobre r¡na propiedad que no ha aparecido,o
bien, seasertará debajo de u,t contrato anterior. Además se Ie dotará de las rúbricas de aquellos canónigos que actuaron como foratarios o fiadores,
y
delepígra-fe triparlito
quefacilite
Ia r¿ipidaidentificación
dentro de esteinstrume[to
ar-chivÍstico,
aulr.lxe cabe destacar que en ocasioIres, estetipo
especial de epi-grafe ya aparecía en el propio asiento en actas capitu¡ares.FSl tJt)Il) DIPI t)\1Á t fl al UFLa'RI\ÍFR I IBRO DF R|MAl'l:S r)j Rr:N1AS r]r' r A rrir r
SrA
1',71 Por otrapaÍe,
loslibros
de remates de rentas, como docume¡rtos elabo mdos por los notarios de la escribaría capitularsiguie[do
las mistrras nor]nas deredacciór
qle
los libros
de Ílotas en dondc se conservaba:llos
rcgisfos.
ta.rbién
podíancumplir la lrnciór'r
dc ¡cgistros auxiliarcsanlc
una cvenlual expodición del contrato en pública for ma. Un fenórneno propio de unaéloca
en la que el proceso de elaboración y conservación de los registros se llevaba
de manera imperfectas, por lo que en dgunas ocasiones en que no se pudiera acceder a estos.
los
notarios necesitabanrecurrir
a otros instrumentos como los Iibros de remaaes o las actas capitulares6, en los que se dejaba constanciaa través de una
.ot¿
de expedición, que en el caso de los libros de remates esuna pequeña ma.ca que se dejaba en el margen izquierdo. También se proce-día a ca¡ceJar aquellos asientos que no tenían
validez
barrándolos median-teel
uso de iíneas inclinadas paralelas, o cieura
nota en la que se abrevi:i laexpresiór «niáil valet>.
Una realidad exclusivadel primer
libro de
rema:esde rentas y¿ que a t!-avés de las aclas capiaulares podentos corstatar que esta
práctica desapareció
po.
completoen
1465, probablementepor
unaregula-ción
capitular sobreel
proceso de expediciónlotarial
que ha desaparecidoy
que seríau¡
precedente de lo dictaminado en la Pragmática de 1503.6.
Losnotarios
qlreredactan
ellit¡ro
de rematcs dcrcntas
La
redacción del Jibro de remates es asumida porel
notariotitular
de laescribanÍ¿r capitular, aquél que también se encarga de elaborar la ntayoÍ parte de los asie¡tos en los
libros
de acuerdosy
de los documentos notariales. Enla
cronologíadel
libro. el tituiar
erael canórigo
Juan Fernández de Ia Rúa. un escribano público de nombramiento episcopai por delegación de poderre-gio en
virtud
dei terciojüdsdiccional
que disliutaba la mitra en Oviedo, cuya mano observai.os en más del 95% de los asientos.En ocasiones. aparecen otras manos pertenecientes a beneficiados del
ca-bildo
en calidad de notarios apostólicos. que ejercen como notariosauxili¿,
res de la esc¡ ibanía capltular. Como se trata de un productoesciturario
que sc ¡ealizaba a posterioridcl
ac:o jur'ídico, rara vez encoll:ramos la actuacion de uno deestos.otarios
en la elaboración de r¡n asiento. eincluso
tenemosun ejemplo, ante.iolmente
mencionado, dondeel notatio titular
escribe un asiento sobre uncont,ato
quefue
puestopor
escritopor otro notado
apos-tólico
ya
queel
titular
actuabacomo
ororgante(3r 3v).
ExcepcionalmenteJunla de Andalu.í¿. Serilla, 1990;p..10.
6 VruL MoNrEs. Néstor: «l-a príclica rcgistrador¿ dr los nol¡fus cclesiásticos de Ovicdo en la Baja Edad Media», x. La¿k:r¡turu de lu ¡nenrrr¡dr /o.r r¿B¡r¡ror (E. CAN L{R¡LL } M. Co
NLAS. eds.). Actas de las
Vill
Jornadas dc Ia Socicdad Española dc Clsncias y Tócnicas Hislol'12 N r--sl()tt vtott,NloN
l.li
estos
notarios
iliiciab¿rn una nueva cntrada,y
cuando esto sucede" aplican supropio lormato
de estructura de asiento.El mejor ejemplo
lo
componen tres casos que curiosamettc monopolizan uDmisüo bifolio, el
pertcncciente alcuadernillo 3,
que además no se corresponde con la secuencia cronológica del
libro,
ya que dcbcría estar integrado cn otro cuadernillo. En este casoel
epÍgrafe erasencillo ya
que solamente contienela
información
sobre el bien, mientras q!¡elos
d¿rtos sobreel foratario
y
la
renta anual aparecen enlos márgenes laterales de ur]a redacción que se ajusta a una columna central. También
existe[ otros
dos cesosde
estructura más sencilla. en donde sólr¡ aparece el epígrale del¡1ulo
del bien (153r) o, simplemente, sólo aparece la redacción (39v),lo
cual nos indica que la manera de clisponer los asientos esdecisión personal del p.oaes;onal que lo elabora.
Menos extraño lesulaa que estos notarios apalezcan en asientos
o
ano-taciores
quemodifican
u¡a
enkada, ya que podían ser realizados varias dé-cadas después, cuandoel propio
Juan Fernánclez ya habÍa dejado cle actuar como notario en la [glesia cle Oviedo. Perolo
más habitual es que aparezcanrellenando los huecos dejados por el norario
titular
a la hora deindicar
quiénes son los fiadores, fenómeno producido por el hecho de que
e[
muchos ca sos el otorgamiento de éstos se real:zaba a posteliol.i. Porello
puedenexistir
huecos rellenados por el propio notariotilular
con ot.a tinta o que no se ajustan al espacio en blanco,
los
completados por otra malto pertel1ec:er]:ee.ino
de los notarios auxiliares,y
los que nunca han sido rellerados.Un caso excepcional es el de un
.otario
auxiliar que se permitecoregir
el dato de lacualtÍa
de renta ar]u¿l del contratooriginal.
Se trata de una renufl-cia deforo
realizadaen
1458(6r) cu¡a
rentaest;br
asociadr a una aniversa-ria de unfallecido
establecida varias décadas atrás, pero que el notariotitula.
fljó
erróneamente en dos ma¡avedís más, algo que posterio.menteel
notario Gonzalo Ferniíndez deMigolla
achacó a que el primer notario no había visto correctame¡te el dato en las act¿rs capitulares de 1439, y lo corrigió tanto en eiepígmfe como en la redacción, con sendos raídos, por
lo
qle
notulo
mars remedio que escribir deba.jo una salva de
ero.es
mencion¿lndo el suceso.Todas estas aportaciones
provocall la apariciól
deun
buen número dema¡os
quercrlejan la
dife¡entelbmación grfiica
de los notarioseclesiásri-cos. Aunque podemos decir que todos aplican la modalidad cursiva usual de
Ia
escritura gótica, aqLtélla que está destinadaa
Ios productos de usointer
no
como son loslibros
deadministracióD-,
Ia esclitura de estos notarios apostólicos entremezcla características dcla
gótica castellanay
dela
gótica bastarda, escrituraoficial
del
papado que necesitan aprender para ser nombrados y poder ejercer sus funciones, generaldo asÍ
u.a
gót:ca híbrida7.i
Aspecto gráfico sobre el quc no vamos a incidi. por no ser nuestro obictill.r, que ha sido analizado en ( la i.jrNo MARrfNEz, N,taría Carmen d.l :"Bilinsüismo- B igr¿i i sm o: un ejemplo se-\ illano del siglo xv,, eI Actu\ ¿el
lI
Can|relo His?á¡tíco de ldrin nedi¿'Lri, Univeruidad deESTIIDIO DIPI-OI{A'] IC') DEL I'RJIÍER I-ItsRO DE REN,I,AIES !E RE\IAS I]]: I,A IG].T,SIA
7.
El
libm
de remates de rentas comofuente histririca
r73
Si
bien ellibro
cle remates de rentas Do se caracteriza por aportarnos unainfo¡¡nación muy
variada,cs
vital
para conocertodo
lo
relacionadocon
la propiedad que gestiona directametaela institución
capitular. donde podre-mos realizar un seguimiento exhaustivo por su caláctcl seriado.Evide¡rtemente es
la mejor
pieza docume¡r:al pala conocer ell¡nciona
mierlto de la explotación rentística del patrimonio capitLrl&, cómo el cabildo remata el
dominio
útil
de sus bienes entre sus propios bcncficiadosy
algut1as aerso]as
paticulares
a través del contrato defolo.
cesión a lirrgo plazoy
?equeñi. renta. que resultaóptimo
para estimularla
inversión delusufir¡c-tuario.
qul]a
su vez seráltn intermediario
que cederáel
bien con contratos más prccarios. ElliSro
de remates nos indicará cuáles son las posesioncs clclcabildo,
dónde están siauadas,cómo las
cede a terceras personas.quiércs
sonlos
destiüatarios, quéobligacio[es
de reparacióny
mantenimiento tie-ncn. cuáles son ios ingresos r¡ue percibealualmer:e
en concepto de renta y caliro se reparten éstose¡tre
las diferentes partidas, qué beneficiados actúan como fi¿dores para asegurarcl
correctofurcionamiento
dc las arcas capitu iaros, asícomo
ul1 largo etcéterd de ponnenores tratados. Además gracias ala curiosa
fornla
dedistribució¡
de los asientos por la que se deja una plana por cada prop:edacl. poder':.los seguir la evolucióü de ésta alo
largo deva
asdécadas. co¡rociendo si carnbió de propietarios, si el cab;ldo aprovechó para cambiar las condiciones del contrato
irlicial.
siexistió
uD cal1]bio de fiadoresy
demás cuesliones.Debemos
de diferenciar
entre las plopiedades ruralesy
urbanas.En
elprimer caso observaremos cómo el cabildo únicamente cede grandes lotes de posesii)nes que se co¡ocen como celleros. re:]aas o yuguerías, a benel'lciados qrle aclúan como renteros
y
tenedores.cedie.do
esos lotes desmembrados apeqreños usufructLrarios (campesinos ricos. g:upos
Iamiliates y
clemás) nls-diante co;'lt¡atos deforo
con el consentimiento deia
asambleacapitularl
porelio
podemos señalar que son meros inter,nediarios enlrela institución y
losposeedores
finales,
sacandoun
margen de beneficio entrela
cuotafiia
que pagan porello
y el monto total de Ios diferentes contlatos que gestionen.Sin
exbargo,
lafigula
de1 tenedor, como encargado de gestionar bieneslejanos, no tiene sen¡ido en los foros de inmuebles urbanos en la capital. e in cfuso ta¡Tbién de alguna pequeña posesión rural cercana. En el
lib¡o
de rema les c¡rcontraremos información sob.e todas las casasy
solares aforados ta,ltoa
canónigos comoa
particulares (burguesía). porlo
que podemos hacer unbuen estudio sobre
el
me¡cadoinmobiliario
de la capital asturiana ya donri nado en granpaÍe
por el propio cabildo, sabiendo en qüé calles se ubicabaÍltill¿: enlrc el rcgionalismo
l
l¿ inlcÍr¿cionaliari(ir1 grálica".ta;ti
l'-¡ t,. tt;".tt
.r f
t,.
! ttr,,
Lr..4..(,.tfr.cicl,..l.c
Wien. 2(XlUr pp. 317-330.xn Ad¿\ ¿u XYe coloErc du Co"
1'74 Nt-_s t()R vlcIl, ñt()N ,s
e incluso disponiendo de vagas ret'ererrcias espaciales
-como
la dcsclipciónde los
linderos-,
por lo que podemos observar las diferencias de precio depcn-dienclode la
ubicación. También observaromosla ciara
especulación exis-tente con laaparició¡
de numerosos cambios delbralario
por traspasoy
Llnapasmosa
evoluciói
aemporal de Ios precios. Además, sabl'emos también dcl mal estado deaiguros
de estos inmuebles, por alusión a las .eparaciones que.e
erig,en)
\Jtrus LlclJlle.inforrali\os.
Pero
los
asientosdel
libro
de
remates de rentasno sólo
sonútiles
paraco.ocer
el comport¿lniento económico de los beneficiados como inte.media-rios o fiadores. sino que también sirven para haceru¡
estuclio de su cultura gráfica a través de sus rúbricas.En
definitiva,
ellibro
de remates de rentas no sólo es Lrna interesatlte pieza para conocer el funcionamiento clel sister.a