PROFILAXIS SISTÉMICA ANTIVENEREA INFORME PRELIMINAR@OBRE EL PROGRAMA
DE TIJUANA, B. C.”
Por el Dr. GUILLERMO SAMAMÉ, M.P.H.
Miembro de la División de Xalud Pública de la Oficina XanitarZa Panamerkana, Ofic&a Regional para las Américas de la
Organización Mundial de la Salud
En septiembre de 1949 las autoridades sanitarias de México, con la ayuda económica y técnica del Instituto de Asuntos Interamericanos y de la Oficina Sanitaria Panamericana, iniciaron un programa de pro- filaxis antivenérea en la ciudad de Tijuana, Baja California. El objetivo de este programa era el de reducir la incidencia de las enfermedades venéreas mediante la administración de una inyección cada 7 dfas, de 300,000 U. 0. de penicilina G-procaína con monoestearato de aluminio al 2% en microcristales (PAM) a un grupo específico de personas que por razón de sus actividades están expuestas a contraer enfermedades ven&eas convirtiéndose en reservorios de infección.
Este tipo de penicilina con niveles terapéuticos en la sangre por encima de 0.03 unidades por CC en un porcentaje superior al 90% durante 96 horas y teniendo en cuenta que el periodo de incubación de la bleno- rragia es de 2 a 8 dfas, con un promedio de 4 dias, podría entonces evitar la aparición de síntomas clfnicos de infección neisseriana en el grupo asf tratado.
Las organizaciones de salud pública de uno y otro lado de la frontera mexicana-estadounidense, tales como la Dirección Técnica de la Cam- pana Antivenérea, Dirección General de los Servicios Coordinados de Higiene y Asistencia en Estados y Territorios, Dirección de Cooperación Interamericana de Salubridad Pública, Servicios Coordinados de Hi- giene y Asistencia de Baja California, Servicio de Salud Pública de los Estados Unidos, Marina Americana, Departamento de Salud Pública del Estado de California, Departamento de Salud Pública de la Ciudad y Condado de San Diego, han cooperado en estas actividades que fueron coordinadas por la Oficina Sanitaria Panamericana.
Previamente a la primera inyección cada persona fu6 examinada clmicamente, con exámenes de laboratorio para el diagnóstico de sffilis y blenorragia complementarios. TambiBn se llevaron a cabo esfuerzos especiales para la localización y control de personas en el grupo indicado. Desde el punto de vista de educación sanitaria se impartió educación de persona a persona, se publicaron folletos czd hoc, se dieron charlas, se exhibieron películas y se transmitieron conferencias apropiadas.
Para avaluar este programa tres fndices podrfan haber sido empleados durante el período septiembre 1949abril 1950:
*Trabajo leldo en el III Congreso Centroamericano de Venereologla, El Salvador, mayo 4-7, 1950. .
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1. el mímero de casos nuevos de enfermedades venéreas en la población civil de Tijuana;
2. el número de casos nuevos de enfermedades venéreas en el grupo especffico de personas recibiendo el tratamiento profiláctico y
3. el número de casos nuevos de enfermedades venéreas en el personal naval de San Diego, California,l nombrando Tijuana como fuente de infección. El primer índice es imposible de emplear debido a que no se cuenta con información de los médicos privados que no preparan los informes epidemiológicos ni comunican los casos de enfermedades venéreas a la Unidad de Salubridad y Asistencia de Tijuana, B. C.
TABLA No. l.-Personas que han recibido profilaxis sist&mica: septiembre 19@- abril 1960
Concurrencia regular. . . . . . . . . . . 400 58.8
Concurrencia irregular. . . . . . 93 13.6
Abandono... 187 27.5
Totales... 680 99.9%
TABLA No. 2.-Personas infectadas con s@lis y/o blenorragia antes de recibir
pro$laxis sist8miea: septiembre i9@-abril, 1950
l NhErO Porcentaje
Sffilis :
Sffilis latente tardfa ... Sffilis latente reciente ... Sffilis reciente sintomatioa. ... Aparentementesanos ...
177 26.0
9 1.3
2 0.2
492 72.0
Totales . . . _ . . . . . . . . . . . . . . Blenorragia:
680 99.5
Enfermos (frotis y/o cultivos positivos). . _ . . Aparentemente sanos. . . . . . . . . . . . .
111 16.3
569 83.6
680 99.9
En lo que respecta al segundo índice, la tabla No. 1 muestra el número de personas que han concurrido regularmente, irregularmente, o que han abandonado el tratamiento profiláctico. Se calcula que el grupo, al cual el programa está dirigido, es de 800 a 1,000 personas.
La tabla No. 2 muestra el número de personas infectadas con sffilis (en todas sus formas) y blenorragia antes de recibir tratamiento pro- filáctico.
En la tabla No. 3 se muestra el número de personas que en el grupo
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que ha recibido profilaxis han sido infectadas con blenorragia durante el período de tratamiento profilláctico concurriendo regular o irregular- mente. Durante este mismo período (septiembre 1949-abril 1950) no han sido descubiertos casos infectantes de sffilis.
TABLA No. 3.-Casos de blenorragia y s@lis durante el perfodo de profilaxis sistd- mica: septiembre 194%abril 1960
Casos de blenorragia. . . . . . . .I
Casos de sffilis infectantes*.. . . . . . . . 15 / 23 / 38 Totales.. . . . . . . I 15 l 23 I 38
TABLA No. 4.-Casos de enfermedades venéreas en el ll0 Distrito Naval, San Diego* California nombrando Tijuana como fuente de infección: septiembre 1949-abril1960
Promedio aritmético mensual
Enero-septiembre 1949. . . . . . . . . . . . . . 86.9 casos Octubre 1949-febrero 1950. . . . . . . . . . . . . . 46.6 casos
El tercer índice empleado ha sido el del número de casos nuevos de enfermedades venereas en el personal naval de San Diego, California, nombrando Tijuana como fuente de infección. Las cifras usadas no son específìcas sino absolutas, pero se hace notar que el efectivo del personal y del numero de marinos que cruzaron la frontera mensualmente no variaron de un modo significativo.
La tabla No. 4 muestra los casos de enfermedades venereas en el ll” Distrito Naval nombrando Tijuana como fuente de infección. Los pro- medios empleados no se han dividido para las distintas enfermedades ven&eas pero el numero de infecciones sifilíticas es bajísimo (i.e. 26 casos para todo el año 1949) de allf, pues, que la reducci6n de casi un 507o durante el tratamiento profiláctico se asdcriba a una disminución real en casos de blenorragia.
En resumen, puede decirse que aunque no pueden de ningrk modo presentarse conclusiones definitivas, los resultados son satisfactorios y es de esperarse la confirmación de ellos en el futuro. Es interesante mencionar que durante la 8a. reunión anual de la Asociación Fronteriza Mexicana-Estadounidense de Salubridad Pública que se acaba de llevar a cabo en Chihuahua, México, esta Asociación acordó:
(1) Felicitar a las autoridades sanitarias de México, a la Oficina Sanitaria Panamericana, al Instituto de Asuntos Interamericanos y a las autoridades sanitarias de los Estados Unidos por la preparación, ejecución y colaboración en el programa de profilaxis antivenérea de Tijuana.
(2) Recomendar al Gobierno de México la continuación de estos programas.