consejo directivo
comité regional
ORGANIZACION
ORGANIZACION
PANAMERICANA
MUNDIAL
DE LA SALUD
DE LA SALUD
XXII Reuni6n XXV Reunión
Washington, D.C. Octubre 1973
Tema 24 del proyecto de programa CD22/19 (Esp.)
11 septiembre 1973 ORIGINAL: ESPAÑOL
INFORME SOBRE EL ESTADO DE LA ERRADICACION DE LA VIRUELA EN LAS AMERICAS
La viruela, epidemiológicamente característica de las áreas urbanas o de grandes concentraciones de personas donde se mantiene endémica produ-ciendo brotes o epidemias según el nivel inmunitario de la población, es una de las enfermedades sujetas al Reglamento Internacional de Salud.
Pese a que el hombre es el único depositario del virus de la enfer-medad y que se dispone de un arma profiláctica eficiente y comprobada desde hace casi 200 años cuando Jenner inoculó al niño James Phipps el 14 de marzo de 1796, la viruela continuó existiendo en forma endemicoepidémica en casi
todos los continentes, haciendo víctimas principalmente a los menores de 15 años de edad entre quienes ocurre el 60% de los casos conocidos.
Para ilustrar la situación existente en un período ms reciente basta referir que entre 1963 y 1971 se conocieron 765,632 casos de viruela en todo el mundo, 36,154 de los cuales ocurrieron en las Américas. Si se considera que la relación de casos notificados contra casos efectivamente existentes en areas en donde no hay programas de vigilancia epidemiológica bien orga-nizados puede elevarse hasta 1:40, es posible formarse una idea de la mag-nitud del problema en el mundo.
En la Regi6n de las Américas, entre 1948 y 1971, se conoció un total de 208,575 casos de viruela ocurridos en paises en donde la enfermedad ha sido endémica. El Cuadro 1 presenta los casos notificados de viruela en el periodo 1955-1971.
Situación del problema en las Américas
Los tres países de Norteamérica han estado libres de viruela desde hace varios años. En Canadá se notific6 un caso importado de Brasil en 1962 y en Estados Unidos de América se notificaron dos casos importados en 1955 y otro en 1957. México está libre de viruela desde 1952.
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Tabago en 1948, Martinica y Antillas Holandesas en 1951, los demás países de Amrica Central y el Caribe han estado libres de viruela.
En Sudamérica, Bolivia había erradicado la enfermedad en 1961 pero fue reintroducida en 1964. Paraguay y Perú, después de exitosas campañas de erradicación, fueron igualmente reinvadidos por la viruela. Chile, que desde 1954 no notificaba casos, reportó uno importado en 1959. Desde en-tonces no se han presentado nuevos casos. Ecuador no presenta casos desde 1964. Venezuela, después de haber alcanzado la erradicación en 1957, sufrió en 1962 un brote en la frontera con Brasil como resultado de casos importa-dos, brote que fue prontamente contenido. Uruguay, libre de viruela desde 1957, ha notificado desde entonces solo casos esporádicos resultantes de importaciones. En 1965 continuaban con viruela endémica Argentina, Brasil, Colombia, Paraguay y Perú.
La campaña de erradicación
Teniendo en cuenta la situación epidemiológica de la enfermedad en las Américas y la disponibilidad de un recurso profiláctico altamente efi-ciente, el Comité Ejecutivo de la Organizaci6n Panamericana de la Salud, reunido en Washington, D.C., en 1949, aprobó la propuesta del Director de
iniciar la erradicacin de la viruela del Continente, y la misma fue luego
ratificada por la XIII Conferencia Sanitaria Panamericana, reunida en Santo Domingo en el ao 1950.
Desde entonces, mediante una serie de resoluciones, los Cuerpos Direc-tivos tanto de la Organizaci6n Mundial de la Salud como de la OPS han respal-dado reiteradamente esa decisi6n. En el Anexo I se presentan las principales resoluciones de interés para este problema.
En 1958 Rusia propone que la erradicación de la viruela en el mundo se inicie bajo la orientación de la OMS. En 1965, los Estados Unidos de America complementan la sugerencia proponiendo que la OMS haga un esfuerzo especial para erradicar la enfermedad durante el próximo decenio.
La Carta de Punta del Este en 1961 recomendó a los Gobiernos que
to-maran medidas de efectos inmediatos a fin de alcanzar la meta propuesta según lo expresado en los siguientes trminos: "Erradicar el paludismo y la viruela del Continente e intensificar el control de las enfermedades
infec-ciosas frecuentes, tales como las entéricas y la tuberculosis".
Los Presidentes de las Américas, en reunión celebrada igualmente en Punta del Este en 1967, específicamente recomendaron que "se ponga en eje-cución medidas destinadas a erradicar aquellas enfermedades para las cuales existen ya procedimientos que permitan su total eliminación". Esta
recomen-dación vino a reforzar la de los Ministros de Salud del Continente quienes
Los Gobiernos de los paises en donde todavía existen focos de viruela deben intensificar y acelerar los programas nacionales de
erradicación, dándoles la mayor prioridad dentro de los planes na-cionales de salud y, para tal efecto, buscar a nivel nacional e in-ternacional los fondos y recursos adicionales que se necesiten;
Los Gobiernos que ya han erradicado la viruela deben esta-blecer procedimientos dentro de sus servicios de salud, que les garantice el mantenimiento de un adecuado nivel de inmunidad y una vigilancia continua para evitar la reintroducci6n de la enfermedad. Esto puede ser realizado mediante la vacunación anual de una quinta parte de la poblaci5n;
Los Gobiernos deben coordinar sus esfuerzos y ayudarse
mutua-mente en el desarrollo de programas de inmunizaci6n contra la
vi-ruela destinados a erradicar la enfermedad de las Américas en el mas corto lapso posible. Colaboracin entre los países es de es-pecial importancia en las zonas limitrofes.
Conocida así la decisión tomada por los gobiernos y los Cuerpos Di-rectivos de la OMS/OPS, se concentraron todos los esfuerzos con miras a lo-grar la erradicación de la viruela y esta actividad pas a considerarse como una de las ms importantes de la Organización. Recursos financieros fueron
asignados y con autorización del Comité Ejecutivo de la OMS, en su
Resolu-ción XII de la 22a Reunión, se cre6 el Fondo Especial para Viruela. La 19a Asamblea Mundial de la Salud, que en mayo de 1966 aprobó el programa y pre-supuesto para un. programa mundial de erradicaci5n de la viruela, asignó una contribución al programa de las Américas a iniciarse en 1967.
La Organización Panamericana de la Salud prepar6 en 1966 una encuesta para evaluar la situación de la viruela en los países de la Región y sus re-sultados fueron presentados a la XVII Conferencia Sanitaria Panamericana. Su estudio dio a conocer el tipo de asistencia internacional que los países requieren para la organizaci6n, ejecuci6n y evaluación de sus programas de erradicación.
A partir de 1967 la OPS firmó acuerdos y elaboró planes de operación con varios países, de acuerdo con las condiciones epidemiol5gicas de cada uno en relaciSn al problema de la viruela.
Los paises fueron seleccionados en tres grupos segGn el tipo de acti-vidad que debiera desarrollarse:
1. Fase de ataque. Países con cinco o ms casos de viruela por 100,000
habitantes y menos del 80% de la población con cicatriz de vacuna.
2. Fase de consolidaci6n. Paises con menos de cinco casos de viruela
CD22/19 (Esp.)
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3. Fase de vigilancia y mantenimiento. Paises libres de viruela por
mas de dos años.
El estudio presentado a la XVII Conferencia Sanitaria Panamericana
demostró las dificultades que encontraban los paises de America para
erra-dicar la viruela, agrupadas en tres categorías:
a) Dificultades presupuestarias. Los países no disponían de recursos
presupuestarios suficientes para la adquisición de vehículos, inyectores a presión, equipos de laboratorio y otros suministros indispensables para
lle-var a cabo una campaña de erradicación. La compra de la mayoría de los
equi-pos y suministros necesarios exigen cambio de moneda fuerte.
b) Carencia de planes adecuados. Esta dificultad ha sido causa im-portante del fracaso de algunas campañas. La falta de continuidad,
indis-pensable en los programas de mantenimiento para asegurar un nivel mnimo
satisfactorio de protección de la poblacin, ha sido responsable de la re-introducci6n de la viruela en dos países sudamericanos.
La ausencia de supervisi6n y de evaluación para conocer el nivel de cobertura y prendimiento de la vacuna ha sido otra falla corriente. La
in-fraestructura sanitaria en la mayoría de los paises era deficiente y no es-taba condicionada para efectuar tan importantes actividades.
c) InrSuficiencia de vaeuna. Además de problemas de orden financiero, dificultades técnicas impidieron a cierto nimero de paises producir y satis-facer sus necesidades de vacuna liofilizada potente, estable y libre de
contaminación. Las donaciones de otros paises no eran suficientes para abas-tecer un programa en forma eficiente y continuada.
Por otra parte, la producción y el uso de vacunas contaminadas o de baja potencia, resultado del deficiente entrenamiento del personal respon-sable de su fabricaci6n, y la existencia de equipos inadecuados, han hecho inútiles los esfuerzos de varios paises habiendo sido necesario revacunar fareas que ya hablan sido vacunadas en ms de una oportunidad.
Actividades desrrolladas
1. Con base en el conocimiento del problema y las dificultades de los
países para solucionarlo, la OPS firm6 acuerdos con los Gobiernos de
Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela, y colaboro directamente con los paises en la elaboración de los planes de operaciones correspondientes.
2. Para asesorar el programa, la OPS procuró estructurarse técnicamente
y para tal efecto nombró un Asesor Regional que coordinarla las actividades en forma continental, tres asesores de epidemiología para la Zona V (Brasil, único país que presentaba viruela endémica) y uno por cada una de las Zonas
Estrategia y metodologSa
Especial interés se dio al diseño de una estrategia y metodología para el programa de erradicaci5n de la viruela, que comprendió fundamental-mente los siguientes aspectos:
a) Seminarios que, ademas de fijar normas y procedimientos de trabajo y orientación en el terreno, incluyeron estudios de técnicas de vacunación y análisis de brotes ocurridos con el fin de evaluar su importancia en el mantenimiento de la endemia.
b) Supervisi6n y evaluación de las actividades de vacunación con el fin de conocer con exactitud la eficacia y los resultados de las labores realizadas.
c) Preparaci6n de manuales de operación para distribución a los paí-ses, especialmente a aquéllos que hablan firmado acuerdos con la OPS para erradicar la viruela. Manuales para vacunadores, supervisores y evaluado-res fueron especialmente preparados para Brasil.
d) Entrenamiento de personal responsable de las actividades en los
varios sectores del proyecto. Con la cooperación del CDC y el patrocinio del Gobierno del Brasil y de la OPS, se realizaron en Sao Paulo, Brasil, tres cursos a los cuales asistieron 18 candidatos de 13 patses. Ademas, la Figura I presenta los laboratorios habilitados para diagnóstico en nuestra
Regi6n.
e) Asesoramiento en la reorganización y equipo de los laboratorios
nacionales de producci6n de vacuna antivari6lica para que lograran los es-tándares de la OMS en cuanto a potencia, estabilidad y ausencia de contami-nación de la vacuna.
Al iniciarse el programa de erradicaciSn emprendido por la OPS, la producción era de 17,557,600 dosis anuales de vacuna liofilizada producida en laboratorios de siete palses. Esta vacuna, además de ser insuficiente para atender la demanda de la Reg6in, no satisfacta los estándares de po-tencia y estabilidad y frecuentemente estaba contaminada.
Con la asistencia de los Laboratorios Connaught de la Universidad de Toronto, Canadá, se proporcion5 asesorfa tcnica permanente, ademas de re-cursos financieros y equipo moderno para producción de vacuna liofilizada a Argentina, Brasil, Colombia, Chile, Ecuador, México, Perú, Uruguay y Venezuela.
CD22/19 (Esp.) Página 7
FIGURA I
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EN LAS AMERICAS
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Produccci6n de Vacuna Antivari6lica Liofilizada en las Américas
1966-1972
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1966 1967 1968 1969 1970 1971 1972
Argentina - 560,000 14,944,800 21,427,850 44,350,325 12,218,600 18,156,500
Bolivia 1,800,000 400,000 - 230,000 235,250 -
-Brasil 9,386,200 31,331,900 49,482,650 61,000,000 72,298,050 44,726,975 29,386,650
Chile 36,500 693,000 1,962,000 3,950,000 721,000 500,000 483,500
Colombia 2,535,000 4,504,502 7,992,200 7,586,500 10,800,000 4,000,000 4,300,000
Ecuador 2,019,800 1,559,740 - - 1,800,000 2,400,000 1,200,200
Guatemala - - 263,300 - -
-Perú 1,033,100 2,220,000 5,848,750 6,527,200 6,227,800 5,227,950 4,670,000
Venezuela 747,000 624,000 - - - - 301,025
CD22/19 (Esp.) Página 7
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Produccci6n de Vacuna Antivari6lica Liofilizada en las Américas
1966-1972
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1966 1967 1968 1969 1970 1971 1972
Argentina - 560,000 14,944,800 21,427,850 44,350,325 12,218,600 18,156,500
Bolivia 1,800,000 400,000 - 230,000 235,250
-Brasil 9,386,200 31,331,900 49,482,650 61,000,000 72,298,050 44,726,975 29,386,650
Chile 36,500 693,000 1,962,000 3,950,000 721,000 500,000 483,500
Colombia 2,535,000 4,504,502 7,992,200 7,586,500 10,800,000 4,000,000 4,300,000
Ecuador 2,019,800 1,559,740 - - 1,800,000 2,400,000 1,200,200
Guatemala - - 263,300 -
-Perú 1,033,100 2,220,000 5,848,750 6,527,200 6,227,800 5,227,950 4,670,000
Venezuela 747,000 624,000 - - - 301,025
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Además de haber multiplicado la cifra de producción del año 1966, la estabilidad y potencia de la vacuna liofilizada producida actualmente es sa-tisfactoria. La vacuna preparada en huevos es igualmente estable y potente y los resultados obtenidos en el terreno en Brasil son bastante ilustrativos.
Profesionales encargados de la producción de vacuna antivari6lica liofilizada en Argentina, Brasil, Colombia, Chile, México y Pera han visi-tado los Laboratorios Connaught para familiarizarse con las técnicas allí empleadas. Igualmente se facilitaron visitas de intercambio entre profe-sionales de Argentina, Brasil, Colombia, Ecuador y Uruguay.
Además de la asistencia estrictamente tcnica suministrada a los la-boratorios de diagnóstico y de producción de vacuna y la asesorla prestada para la planificación de la estrategia y metodología, la preparación de ma-nuales de procedimientos y estudios especiales y la distribución de
publi-caciones, cuya lista se da en el Anexo II, la colaboración de la OPS/OMS fue indispensable en la solución de innumerables dificultades de carácter técnico administrativo. Se realizaron actividades tendientes a:
1. Desarrollar eficientemente la fase de ataque a fin de reducir la
in-cidencia a niveles que facilitaran operaciones ms productivas de vigilancia y contenciín.
2. Activar los servicios de vigilancia y contención mediante la
organi-zacíón de unidades dinámicas de notificacin que cubrieran los países en toda su extensión.
3. Disponer que en los programas de vacunación se establecieran
priori-dades respecto a la inmunización de los menores de 15 años y que se diera mayor valor epidemiol6gico para obtener la erradicación a las
primovacu-naciones que a las revacuprimovacu-naciones. Además que todos los recién nacidos
fue-ran vacunados.
4. Establecer la vacunación obligatoria del personal de salud,
particu-larmente a quienes practican en los hospitales, y exigir que la vacunación de pacientes hospitalizados se establezca en forma rutinaria.
5. Desarrollar la práctica de vacunación de mantenimiento en los
servi-cios locales de salud.
6. Instalar un banco de vacuna liofilizada en la sede de la Zona V para
atender a pedidos de emergencia de cualquier país del Continente, y mante-ner existencias de vacuna producida en huevos para atender emergencias en los paises libres de aftosa de Mesoamgrica.
CUADRO 3
CASOS NOTIFICADOS DE VIRUELA EN LAS AMERICAS, 1966-1972
País u otra 1966 1967 1968 1969 1970 1971 1972 TOTAL
unidad politica a
Argentina 21 (b) 23 - - (b) 24 - - (b) 68
Brasil 3,518 4,514 4,372 7,407 1,771 19 - 21,582
Colombia 8 - - - 8
Guayana
Francesa - - (c) 1 _- - (c) 1
Paraguay 5 _- - - 5
Perú 13 - - - 13
Uruguay - - (b) 2 (b) 3 - - - (b) 5
TOTAL 3,565 4,537 4,375 7,410 1,795 19 - 21,682
a) Basado en informes oficiales recibidos en la OSP hasta el 15 de agosto de 1973.
b) Incluye casos importados.
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Colombia, Paraguay y Perú notificaron sus ltimos casos en 1966, y a partir de 1969 comenzaron la fase de mantenimiento.
Los casos ocurridos en Guayana Francesa y Uruguay resultaron de im-portaciones en los años 1968 y 1969.
Argentina, que no había notificado casos en 1968 y 1969, tuvo un brote de 23 casos aut6ctonos en 1970, resultado de un caso importado en la Provincia de Misiones.
Brasil, realmente el responsable de la dispersi6n de la endemia a los países vecinos, presentó en 1970 un nmero de casos muy inferior al de 1969, a pesar de haberse intensificado considerablemente la vigilancia y búsqueda de casos. En 1971 la reducción fue an más notoria pues slo 19 casos de viruela se notificaron en todo el país en ese año, todos ellos ocurridos en
la ciudad de Rio de Janeiro, en tanto que en el mismo periodo en 1970 se ha-bían notificado 1,211 casos. A partir de esa fecha no se presentaron más
casos de viruela en el Brasil.
Dada la necesidad de comprobar el éxito de las actividades que resul-taron en la interrupción de la transmisión y el silencio epidemiol6gico en
todos los paises suramericanos, se realiz6 una investigación de las áreas
consideradas problema, es decir, aquellas en donde se había registrado las últimas notificaciones y donde podrían existir casos remanentes y no regis-trados. Tales áreas en los paises de Suramérica son precisamente aquellas en donde las actividades de vigilancia y mentenimiento son menos eficientes o inexistentes.
Dicha investigación abarcó las áreas de América del Sur en donde la viruela había estado presente recientemente en forma aut6ctona o como re-sultado de importaciones.
Se elaboró un protocolo de los datos, informaciones y encuestas que deberían tener en cuenta los investigadores asignados a cada zona, con los siguientes puntos esenciales:
- Mapa del rea con definición de las localidades a ser visitadas
- Poblaci6n estimada en el rea en estudio
- Relación de localidades que serán investigadas
En cada localidad se entrevistaron:
- Autoridades locales (intendente, prefecto, alcalde, otros)
- Servicios de salud (centros de salud, hospitales oficiales y pri-vados, dispensarios, puestos de malaria, etc.). Se visitaron todos
- Todas las escuelas y colegios. Se enseñaron fotos de casos de vi-ruela y se hicieron preguntas como:
¿Hubo viruela en los ltimos 12 meses? Si No
¿Dónde?
¿Cuándo?
Se interrogó al director del plantel o cuerpo docente
Se interrogaron por lo menos cinco clases; en las escuelas con turnos, se interrogaron los alumnos del turno en funcionamiento en el momento de la visita.
El Director de la Oficina Sanitaria Panamericana, por otra parte, se ha dirigido a los Ministros de Salud de las Américas participándoles del
éxito del programa de viruela y solicitándoles su respaldo y un esfuerzo
complementario para consolidar definitivamente la erradicaci6n.
El mensaje del Director consideró como esenciales los siguientes
puntos:
1. Que se instruyera a los organismos locales de salud para que se
man-tuviesen particularmente alertas y tomasen las medidas necesarias con el fin de identificar casos sospechosos de viruela, incluyendo exámenes de la-boratorio, e investigar la cadena de transmisi6n de la enfermedad.
2. Que se facilitase la cooperación del personal del programa de
erra-dicación de la malaria para cumplir con lo establecido en el punto 1.
3. Que se realizasen encuestas especiales en aquellas áreas del país
donde se hubiesen notificado los ltimos casos de viruela o donde la vigi-lancia fuese menos efectiva.
El Director ofreció además toda la cooperación necesaria de la OPS/OMS para las investigaciones especiales proyectadas.
Las investigaciones especiales efectuadas en 1971 y 1972 en los paí-ses límites con Brasil y, en mayor extensión y detalle en ese país, demos-traron que no se comprobó ningún caso de viruela en toda Suramérica.
Las encuestas llevadas a cabo por consultores especiales de la OPS/OMS
en los parses y territorios integrantes de la Zona I en América del Sur
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En Venezuela, donde la viruela fue erradicada en 1947, hubo un brote de nueve casos en 1962, en la localidad de Santa Elena, en la frontera con Brasil, como resultado de la importación de casos procedentes de ese país. La evaluación realizada con base a la existencia de cicatrices de vacunación
en 1971 mostró que la protección general de la población era de 91.6% y la de Santa Elena de 82%. La verificación se hizo mediante muestreo.
En la Zona IV las investigaciones periódicas realizadas en Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú confirman el silencio epidemiolSgico registrado desde hace varios años. En los años 1971 y 1972 se hicieron investigacio-nes especiales en todos los paises de la Zona IV para confirmar la ausencia
de casos de viruela.
Fue así como en Colombia se realizaron investigaciones en las zonas selváticas de la cuenca amazónica y de la comisaría del Vaupés, así como también en la Alta Guajira; en Ecuador en las localidades de General Morales y Suscal, sitios en donde se presentaron los ltimos casos de viruela; en Perú en las riberas del Ro Amazonas desde Petr6polis hasta Iquitos, y en Bolivia en la provincia de Larecaja.
Todas estas investigaciones fueron negativas para viruela.
El Cuadro 4 presenta los niveles de protección contra la viruela en los países de la Zona V.
La red de unidades de notificación fue progresivamente ampliada como se observa en los Cuadros 5, 6 y 7, referentes a los años 1971, 1972 y 1973.
Las investigaciones epidemiológicas de casos sospechosos en el pe-riodo 1971-1973, por Unidades de la Federación, inclusive los exmenes de laboratorio efectuados, son presentados en el Cuadro 8.
Otra investigación epidemiológica especial fue realizada en Brasil en 1972, entre el 7 de julio y el 21 de noviembre, extendiéndose por 451 localidades de las Unidades Federales del país.
Un total de 317,292 personas fueron entrevistadas. De esas, 1,309 eran autoridades políticas; 2,534 autoridades de salud; 15,579 presentes en los servicios de salud; 5,278 en servicios mdicos privados; 561 en ofici-nas de registro civil; 45,605 entre comerciantes e industriales; 125,000 en escuelas, entre maestros y estudiantes, y 120,405 personas del pblico general.
La investigación resultó en 96 casos sospechosos reportados, ninguno
de ellos confirmados de viruela. El Cuadro 9 presenta los diagnósticos
fi-nales de los casos sospechosos, inclusive los que fueron comprobados por
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p<CD22/19 (Esp.)
CUADRO 5 Página 15
Unidades de Vigilancia Epidemiológica, Número de Puestos de Notificación Existentes y Media de los que
Notificaron con regularidad durante 1971
Brasil
Unidades de Vigilancia Número de No. Total No. de Muni- % de Co- Media
por Unidades de la Municipios de Puestos cipios con bertura de PN's *
Federación (a) . PN's Puntual
BRASIL, Total 3,953 3,243 2,904 73.5 680
NORTE
Rondonia 2 1 1 50.0 1 ...
Acre 7 1 1 14.3 1 ...
Amazonas 44 1 1 2.3 1
Roraima 2 1 1 50.0 1
Paré 83 1 1 1.2 1
Amapá 5 1 1 20.0 1 ...
NORDESTE
Maranhio 129 142 122 94.6 67 47
Piaui 114 140 114 100.0 66 47
Ceará 142 150 118 83.1 46 31
Rio Grande do Norte 150 130 101 67.3 33 25
Paraiba 171 100 83 48.5 40 40
Pernambuco 164 135 108 65.2 61 45
Alagoas 94 96 94 100.0 53 55
Fernando de Noronha 1 1 1 100.0 1 100
Sergipe 76 80 76 100.0 70 88
Bahía 336 214 180 55.4 86 40
SUDESTE
Minas Gerais 722 288 283 35.9 147 51
Espirito Santo 53 83 53 100.0 77 93
Rio de Janeiro 63 71 63 100.0 22 31
Guanabara 1 23 1 100.0 23 100
Sao Paulo 571 584 571 100.0 489 84
SUR
Parané 288 318 287 98.6 267 84
Santa Catarina 197 188 173 76.6 148 79
Rio Grande do Sul 232 227 219 93.5 211 93
CENTRO-OESTE
Mato Grosso 84 34 25 40.4 34 100
Goiás 221 222 216 97.7 82 37
Distrito Federal 1 11 1 100.0 11 100
(a) En cada Unidad de la Federaci6n existe una UVE instalada, por Capital, en la
Se-cretaria de Salud, así como una red de PN's distribuidos en los municipios con un
Puesto, por lo menos, en cada Sede Municipal.
Situación del Sistema de Notificaci6n de las Unidades de Vigilancia Epidemiológica según el número de PN's instalados en
los Municipios de las Ui.da4des de la Federaci6n
Brasil - 1972
Unidades de la Total PN's instalados Municipios % de Co- % de Pun-Federación Municipios Total Capital con PN's bertura tualidad
BRASIL, Total 3,951 6,074 365 3,513 88.9 53.0
Rondnia 2 25 1 2 100.0 ...
Acre 7 8 1 7 100.0
Amazonas 44 36 12 24 54.5 33.3
Roraima 2 10 2 2 100.0 28.0
Pará 83 76 10 59 71.1 ...
Amapá 5 10 6 5 100.0 ...
Maranhao 129 149 22 129 100.0 40.8
Piauf 114 121 28 93 81.6 79.6
Ceará 142 161 31 130 91.5 ...
Rio Grande do Norte 150 180 17 150 100.0 16.3
Paraiba 171 159 9 153 89.5 100.0
Pernambuco 164 194 28 163 99.4 36.1
Alagoas 94 96 3 94 100.0 9.4
Fernando de Noronha 1 1 1 1 100.0 100.0
Sergipe 74 80 7 74 100.0 81.2
Bahia 336 271 22 249 73.2 24.2
Minas Gerais 722 495 6 490 65.4 34.0
Espirito Santo 53 84 8 53 100.0 100.0
Rio de Janeiro 63 86 24 63 100.0 67.4
Guanabara 1 35 35 1 100.0 100.0
Sio Paulo 571 2,710 13 571 100.0 90.4
Paraná 288 317 32 281 97.6 77.7
Santa Catarina 197 204 8 197 100.0 77.8
Rio Grande do Sul 232 236 14 221 96.1 82.3
Mato Grosso 84 93 12 79 89.3 62.5
Goiás 221 * 227 7 221 100.0 7.5
Distrito Federal 1 11 6 1 100.0 100.0
Datos referentes a noviembre.
* Inclusive 71 PN's bajo la jurisdicción del sector del Distrito Federal de la SUCAM. El criterio utilizado para medir la cobertura se basa en la hipótesis de que un municipio está cubierto 100% cuando hay en él, por lo menos, un PN instalado lo que en realidad n siempre indica una cobertura
CD22/19 (Esp.)
CUADRO
7
Página 17Situación del Sistema de Notificación de las Unidades de Vigilancia Epidemiológica según el nmero de PN's instalados
en los Municipios de las Unidades de la Federaci6n
Brasil - Primer semestre de 1973
Unidades de la Total PN's instalados Municipios % de Co- % de Pun- Casos
Federación Municipios Total Capital con PN's bertura tualidad Sosp.
Inves.
BRASIL, total 3,951 6,381 365 3,554 90.0 56.9 15
Rondonia 2 25 1 2 100.0 ...
-Acre 7 8 1 7 100.0 ...
-Amazonas 44 42 12 30 68.2 28.6
-Roraima 2 10 2 2 100.0 ...
-Pará 83 82 10 65 79.3 * 53.0
-Amapá 5 10 6 5 100.0 ...
-Maranhio 129 151 22 129 100.0 34.3
-Piaul 114 121 28 93 81.6 29.5
-Ceará 142 161 31 130 91.5 15.4
-Rio Grande do Norte 150 180 17 150 100.0 26.1
-Paralba 171 159 9 153 89.5 100.0
-Pernambuco 164 195 28 164 100.0 46.7 * 1
Alagoas 94 96 3 94 100.0 35.6 1
Fernando de Noronha 1 1 1 1 100.0 100.0
-Sergipe 74 80 7 74 100.0 71.9
-Bahia 336 271 22 249 74.1 17.3 2
Minas Gerais 722 511 6 506 69.8 37.4 1
Espirito Santo 53 87 8 53 100.0 94.2 1
Rio de Janeiro 63 91 24 63 100.0 62.9
-Guanabara 1 36 36 1 100.0 100.0 5
Sao Paulo 571 2,962 12 571 100.0 83.7
-Paraná 288 317 32 281 97.6 * 54.4
-Santa Catarina 197 204 8 197 100.0 81.5
-Rio Grande do Sul 232 245 14 230 97.4 89.3 4
Mato Grosso 84 96 12 82 97.6 54.1
-Goits 221 227 7 221 100.0 100.0
-Distrito Federal 1 13 6 1 100.0 100.0
-*Información para el mes de abril
CUADRO 8
Notificaciones, Investigaciones y Diagnóstico Final de Casos por Regiones y Unidades de la Federación
Brasil, 1971-1973*
1 9 7 1 1 9 7 2 1 9 7 3*
Unidades de la Casos Invest. Exámenes Casos Invest. Exámenes Casos Invest. Exámenes
Federación S csp. Reali- de Labo- Sosp. Reali- de Labo- Sosp. Reali- de
Labo-Not. zadas ratorio Not. zadas ratorio Not. zadas ratorio
BRASIL, Total 450 444 320 718 718 375 131 131 97
NORTE
Rondonia - - -
-Acre - - - -
-Amazonas - - - 4 4 4 - -
-Roraima - - - -. - 1
Pará - - - 5 5 5 - -
-Amapa - - - -
-NORDESTE
Maranhao 10 10 4 8 8 5 - -
-Piauf 2 2 2 30 30 7 5 5
-Ceará 20 20 15 5 5 4 7 7 6
R.G. do Norte - - - 1 3 3
-Paraiba 1 1 - 5 5 3 -
-Pernambuco 18 18 9 76 76 34 16 16 12
Alagoas - - - 3 3 4 2 2 1
Fernando de Noronh - - - -
-Sergipe 5 5 5 11 11 2 6 6 2
Bahia 22 16 18 59 59 26 11 11 8
SUDESTE
Minas Gerais 32 32 24 39 39 50 14 14 10
Espirito Santo 31 31 27 19 19 33 4 4 4
Rio de Janeiro 26 26 18 48 48 26 9 9 4
Guanabara 35& 35& 25& 181 181 29 9 9
-Sao Paulo 118 118 80 124 124 64 16 16 18
SUR
Paraná 42 42 35 37 37 38 1 1 2
Sta. Catarina 9 9 6 13 13 7 11 11 8
R.G. do Sul 63 63 40 40 40 24 15 15 18
CENTRO-OESTE
Mato Grosso - - - 7 7 3 2 2 3
Goiás 11 11 10 4 4 6 - -
-D. Federal 5 5 2 .
CD22/19 (Esp.) Página 19
CUADRO 9
Número y calificación de personas entrevistadas en
la encuesta realizada en las áreas de mayor riesgo en Brasil en el ao 1972
Personas Casos sospechosos
Categorías o localidades entrevistadas notificados
Autoridades políticas 1.309 1
Autoridades sanitarias 2.535 3
Servicios de salud 15.579 2
Servicios médicos particulares 5.378 1
Oficinas registro civil 561 6
Fábricas o instituciones comerciales 45.605 1
Escuelas: 125.920 19
Profesores (*) 1.10 ...
Alumnos (*) 26.209 ...
Otras fuentes 120.405 63
Totales 317.292 96
Actualmente existen para las actividades de vigilancia epidemiológica 21 Unidades (UVE's), que cubren 22 estados, el Distrito Federal (Brasilia) y 4 territorios, con subunidades auxiliares donde sea necesario.
El total de puestos de notificación existentes es de 6,362 (PN's) distribuidos entre los 3,542 municipios del total de 3,951 existentes en el país, como se observa en el Cuadro 10.
Merece especial destaque el esfuerzo realizado por el Gobierno del Brasil para interrumpir la transmisión de la viruela invirtiendo en la cam-pafa de erradicación un promedio de $1,200,000 anuales en las actividades
desarrolladas, para tornar factible la vacunaci6n de una población estimada
de 90,000,000 habitantes en 1967 y distribuida en 8,500,000 de km2. Muchos
miraban con escepticismo la posibilidad del Brasil de alcanzar los resultados halagadores actualmente observados, debido a los resultados negativos que
anteriormente tuviera una campaña idéntica en Asia.
La capacidad y la dedicaci6n de los responsables de la Campaña de Erradicación de la Viruela en el Brasil es digna de destacarse. La
elabora-ción cuidadosa de manuales de trabajo; la planificaci6n rigurosa de la lo-gística; la acción desarrollada en el terreno, vacunando, buscando casos, supervisando las actividades, evaluando la cobertura alcanzada en cada rea por los vacunadores y comprobando el prendimiento de las vacunaciones
rea-lizadas, representó un esfuerzo gigantesco.
Fue un trabajo en equipo en que colaboraron desde los directores, técnicos de varias especialidades, hasta el personal auxiliar del Gobierno Federal de los estados y de las municipalidades, buscando un fin único que
era la erradicación de la viruela del Brasil. No fue el esfuerzo de una sola persona o de un solo responsable en dado momento, ni sería justo que así se considerara. Todos dieron su parcela de contribución y la Organiza-ción Panamericana de la Salud y la Organizaci6n Mundial de la Salud se sien-ten orgullosas de haber contribuido con sus técnicos y con sus recursos para alcanzar esa meta que se hizo realidad desde el da 19 de abril de 1971.
En los paises de la Zona VI, Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay, se hicieron igualmente investigaciones especiales en cada uno, excepto Chile,
que no tiene casos a partir del año 1959 cuando tuvo un caso importado.
En 1970 un brote de 24 casos en la Provincia de Misiones, Argentina, resultante de uno importado, interrumpió la ausencia de la enfermedad que no ocurría desde 1966. Una vacunación masiva sucedió al brote, con 84.18%
de cobertura de una poblaci6n de 443,020. Como el programa cronol1gico de vacunación vertical no se desarrollaba normalmente, un consultor especial
CD22/19 (Esp.)
CUADRO 10 Página 21
Situación de la Red de Puestos de Notificaci6n Epidemiol6gica
de Viruela, por Unidades de la Federaci6n y según el
nú-mero de Puestos instalados y los índices de Cobertura
2 Puntualidad - Brasil
Unidades de la Fecha de la Total PN's Instal. Munic. % Co- % Pun- Casos Notif.
Federación Informaci6n Munic. Total Capital c/PN's bert. tual. Inves. Teleg.
Brasil, Total 3,951 6.362 365 3.542 89.6 79.1 25
Norte
Rondonia 14-04-73 2 25 1 2 100.0 ...
Acre ... 7 8 1 7 100.0 ...
Amazonas 21-04 44 42 12 30 68,2 28.6
Roraima 20-01 2 10 2 2 100.0 33.3 18
Pará 28-04 83 76 10 59 71.1 ... 18
Amapá 24-03 5 10 6 5 100.0 ...
Nordeste
Maranhao 21-04 129 151 22 129 100.0 29.6
Piauf 14-04 114 121 28 93 81.6 40.7 3 17
Ceará 14-04 142 161 31 130 91.5 19.1 17
Rio Grande do N. 21-04 150 180 17 150 100.0 18.9 17
Paraiba 28-04 171 159 9 153 89.5 87.9 18
Pernambuco 7-04 164 194 28 163 99.4 44.9 10 18
Alagoas 21-04 94 96 3 94 100.0 12.0 18
Ferndo.Noronha 28-04 1 1 1 1 100.0 100.0 18
Sergipe 24-04 74 80 7 74 100.0 76.3 1 18
Bahía 14-04 336 271 22 249 74.1 21.4 2 18
Sudeste
Minas Gerais 28-04 722 511 6 506 70.1 41.5
Espirito Santo 28-02 53 87 8 53 100.0 94.3 **4
Rio de Janeiro 28-04 63 91 24 63 100.0 58.8
Guanabara 28-04 1 36 36 1 100.0 100.0 2
Sao Paulo 31-03 571 2,955 12 571 100.0 88.0 18
Sur
Paraná 7-04 288 317 32 281 97.6 88.6
Santa Catarina 21-04 197 204 8 197 100.0 87.5 18
Rio Grande do S. 21-04 232 241 14 226 97.4 89.4 3 18
Centro-Oeste
Mato Grosso 28-04 84 96 12 81 96.4 52.1
Goiás 21-04 221 227 7 221 100.0 9.1
Dto. Federal 28-04 1 12 6 . 1 100.0 100.0 18
*El nmero indica la semana de notificación del aflo (semana No. 18 = 4 mayo 1973).
La columna "Casos Investigados" se refiere a los casos notificados en el informe mensual de actividades de las diferentes UVE's para el mes de marzo.
**Datos para febrero.
La vigilancia epidemiológica se efectúa por intermedio de personal competente de la Secretarla de Salud Publica que visita los casos notifica-dos para su ratificación o rectificación.
En Chile, gracias a los programas de vacunación, mantenidos en buen
nivel a través de los servicios regulares de salud, la viruela sigue erra-dicada desde hace 20 años, con la sola excepción de un caso confirmado en 1959. Entre 1964 y 1970 se vacunaron en promedio 1,300,000 personas en las áreas de salud.
En el Paraguay los últimos cinco casos confirmados ocurrieron en 1966.
En 1971 fue realizada una encuesta especial por técnicos de la OPS/OMS y personal nacional en las áreas consideradas de mayor riesgo. En estas
fueron cubiertas 88 localidades de 6 regiones de salud representando una
gira por el país de aproximadamente 5,000 km. Durante la investigación fue-ron entrevistados 39 médicos, 37 parteras, 4 educadores sanitarios, 13 ins-pectores sanitarios, 13 estadísticos, 19 enfermeras, 63 directores de
escuelas primarias y secundarias, 371 maestras de escuelas primarias y se-cundarias, 19 autoridades civiles y 68 escuelas con 9,253 alumnos.
Se examinaron 50 personas como resultado de 15 notificaciones de ca-sos ca-sospechoca-sos sin confirmación de ninguno para viruela. Otra investiga-ción se procesó igualmente en escuelas y puestos de salud a lo largo del país, tomadas al azar entre el total existente.
Se obtuvieron respuestas de 102 unidades de salud y 206 escuelas con
35,898 alumnos, todas negativas con relación a casos sospechosos de viruela.
La vacunación de mantenimiento y la vigilancia epidemiológica se
procesa a través de las regiones de salud y sus servicios regulares de salud.
El Uruguay a partir del año 1963 slo presentó casos esporádicos como consecuencia de importaciones provenientes del Brasil.
Su programa de vacunación, pese a la existencia de un liofilizador suministrado por la OPS/OMS, sigue utilizando vacuna lquida. Sin embargo, la protección conferida es satisfactoria como se verifica por la ausencia de casos aut6ctonos.
Una investigación por muestreo en nueve departamentos demostró la presencia de cicatrices en el 75.7% de 3,208 personas examinadas con un
rango que fluctúa entre 55.5% en el Departamento de Artigas y un 92.3% en el Departamento Treinta y Tres.
CD22/19 (Esp.) Página 23
El resumen anterior de las actividades realizadas desde el comienzo
del programa, iniciado en 1967 con la colaboraci6n de la OPS/OMS, demuestra
que las actividades de erradicación mediante programas de. vacunaci6n
verti-cales o a través de los servicios regulares de salud, complementados por las
actividades de vigilancia epidemiol6gica alcanzaron su objetivo, justificán-dose los esfuerzos y recursos aplicados.
Ahora hay que mantener el éxito obtenido. Es necesario un sistema de vigilancia epidemiológica bien estructurado, con su personal en estado de permanente alerta. Hay que contar con la producción de datos de buena calidad, información rápida seguida de comprobación de laboratorio de todo caso sospechoso y toma de accin inmediata, correspondiente a cada situa-cion observada.
No seria admisible que se descuidara la vigilancia de la viruela, permitiendo su reintroducci6n en esta Regi6n, principalmente cuando sabemos que la vacunación de mantenimiento es precaria, debido a la deficiencia de las infraestructuras de salud de nuestros países.
Esta vigilancia tiene que estar bien estructurada, motivada, activa, con apoyo en personal bien preparado técnica y psicológicamente. Su efi-ciencia depende necesariamente de uniformidad de acción, organización, re-cursos y coordinación unificada dentro de un cuadro bien definido de lineas de autoridad. S1o asT será posible recibir la información y tomar la de-bida acción en tiempo til, para que sea eficiente.
La vigilancia epidemiológica de la viruela bien organizada servirá entonces de infraestructura para el control de otras enfermedades transmi-sibles, particularmente las vacunables, como polio, sarampión, difteria, tétanos y tos ferina. No hay que olvidarse igualmente del cólera, para cuya posibilidad de invasión debemos estar preparados con la debida antela-ción. Si la integración es la palabra de orden en el campo de la salud pú-blica en general, con mayores razones debemos realizarla en lo que se
refiere a las enfermedades transmisibles y en especial cuando se trata de vigilancia epidemiol6gica.
Paralelamente a las actividades de vigilancia epidemiológica es im-portante que los países, especialmente aquellos con intercambio ms directo con áreas infectadas de otros continentes, den la debida atención a las ac-tividades de vacunación de mantenimiento para asegurar un nivel satisfacto-rio de protecci6n. Esta protección es tanto más importante cuando se
considera que la forma prevalente en algunas de las áreas endfmicas es la viruela mayor reconocida por su alta letalidad. Los riesgos de su intro-ducción en un rea con población desprotegida hacen innecesarios comenta-rios adicionales. El Cuadro 11 presenta las vacunaciones registradas en países de las Americas entre 1967 y 1972.
Vacunaciones contra la Viruela en Las Américas 1967-1972
Pafs 1967 1968 1969 1970 1971 1972 (a)
Pafses con Acuerdo para la err dicación
Argentina 2,441,629 323,952 2,141,000 11,008,800 1,544,943 950,000
Bolivia (a) 1,141,991 319,688 442,213 460,096 638,576 211,313
Brasil 17,983,660 21,405,830 25,850,711 37,325,209 18,010,098 13,882,924
Chile 1,556,506 1,520,315 1,304,379 1,150,194 675,616
Colombia 2,307,324 5,236,389 5,543,507 4,520,971 1,243,210 986,553
Cuba 113,489 90,745 114,995 119,507 101,302 17,964
Ecuador 508,247 1,113,741 931,492 945,831 755,649 353,209
Paraguay 167,358 183,098 214,053 337,764 328,761 316,326
Perú 2,222,055 1,676,853 2,195,052 2,630,726 2,118,210 2,419,276
Uruguay 299,269 502,937 442,531 545,696 361,279 166,171
Venezuela 1,502,099 1,592,740 1,378,671 1,119,235 869,078 939,944
Otros Pases Areas
Antigua
1
... ... 618Antillas Holandesas 3,000 ...
Bahamas 4,141 2,273 2,530 3,029 4,076 ...
Barbados 10,865 10,626 9,514 17,000 ...
Belice 5,951 7,390 8,609 ... 8,827 ...
Bermuda 2,589 2,797 ... 3,128 ...
Canadá ... a)1,726,6 5 2 ... 883,214 ...
Costa Rica 673,364 14,589 23,929 83,925 33,953 30,797
Dominica 2,412 2,490 3,797 3,177 ...
CD22/19 (Esp.) Página 25 CUADRO 11 (cont.)
País 1967 1968 1969 1970 1971 1972
Guadalupe 5,457 ... ... 18,039
Guatemala 437,576 121,295 ... ... 140,822
Guyana 5,398 11,823 16,558 536,028 12,126
Guayana Francesa ... ... ... 5,181 10,444
Haitf 338,024 446,506 229,434 ...
Honduras 186,105 156,869 43,172 52,362 145,716
Islas Falkland ... 155 ...
Islas Vrgenes (RU) 278 264 ... 338...
Jamaica 92,587 39,004 ... ...
Martinica 7,084 8,536 ... ... 5,691 ...
México 3,244,116 3,674,081 2,423,472 2,531,062 3,160,369 ...
Nicaragua 93,503 52,233 82,488 ...
Panamá 42,153 44,935 7,610 70,813 ... 29,410
Puerto Rico 56,140 333,296 83,937 83,317 64,507 ...
República 108,642 8,716 8,728 14,789 11,698 ...
Dominicana
St. Kitts-Nevis
y Anguilla 7,378 ... 3,136 2,421 3,323 ...
St. Lucia ... 96 ...
St. Vincent .. ... 1,215 908 ...
Surinam 12,676...
Zona del Canal 9,705 9,452 8,081 8,332 8,279 ...
(a) Provisional.
evaluar el programa de erradicación de la viruela en América del Sur, que se reunió en agosto del corriente año en Brasil. (Anexo III)
La Comisi6n consideró los documentos presentados, escuchó las diver-sas exposiciones complementarias y debatió la ejecución y los resultados de los programas. Además los miembros de la Comisi5n visitaron unidades de vigilancia en diversos estados del Brasil, participaron en una investigación
de terreno y tuvieron oportunidad de observar y evaluar el sistema de vigi-lancia en funcionamiento en el pals.
En base a estas actividades la Comisión confirmó la interrupción de la viruela en nuestro Continente a partir del 19 de abril de 1971, fecha de la notificaci5n y confirmación del ltimo caso de viruela en el Brasil y en las Américas.
CD22/19 (Esp.) ANEXO I
PRINCIPALES RESOLUCIONES DE LA OPS/OMS RELATIVAS A VIRUELA
OPS
Mayo 1949 - El Comité Ejecutivo, reunido en Washington, D.C., aprueba la
proposición del Director de erradicar la viruela.
Octubre 1950 - La Conferencia Sanitaria Panamericana (XIII), reunida en Santo Domingo, Repblica Dominicana, respalda dicha proposicion.
Octubre 1954 - La Conferencia Sanitaria Panamericana (XIV), reunida en Santiago, Chile, autoriza al Director a invertir $144,089 en el programa de viruela.
Octubre 1965 - El Consejo Directivo (XVI) declara la erradicación de la vi-ruela como uno de los objetivos fundamentales de la Organi-zaci6n Panamericana de la Salud.
Octubre 1966 - La Conferencia Sanitaria Panamericana (XVII), autoriza al Director a proporcionar la ayuda material necesaria a los países con miras a erradicar la viruela del Continente.
OMS
Las Asambleas Mundiales 3a, 6a, 8a, lla, 12a, 13a, 14a, 15a, 16a, 18a y 19a trataron el problema de la erradicación de la viruela en reite-radas resoluciones.
El Consejo Ejecutivo en su 22a Reunión, autorizó mediante Resolu-ción No. 12 el establecimiento de un Fondo Especial para la Viruela.
La 19a Asamblea Mundial aprobó en mayo de 1966, por Resolución No. 16, asignación de fondos para el programa de viruela, con cargo a la OMS. Entre 1967 y 1972 fueron asignadas las partidas siguientes:
1967 $ 39,789
1968 842,000
1969 671,000
1970 682,000
1971 682,000
1972 494,421
PUBLICACIONES
1. Manual para Programas de Erradicación
2. Manual para Vigilancia, Control y Mantenimiento
3. Normas para Diagn6stico de Laboratorio
4. Normas para Producción de Vacuna Liofilizada
5. Trabajos y Conclusiones del Grupo Científico
6. Estudios sobre Aguja Bifurcada
7. Boletín de Vigilancia Epidemiológica (Brasil)
8. Normas para Produccin de Biológicos
9. Comité de Expertos en Viruela
10. Distribución de Diapositivos sobre Casos de Viruela
CD22/19 (Esp.) ANEXO III
ASSESSMENT OF THE SMALLPOX ERADICATION PROGRAM
IN SOUTH AMERICA
WORLD HEALTH ORGANIZATION RIO DE JANEIRO / BRASILIA. BRAZIL, 14-25 AUGLIST 1973
La Comisión de la OPS/OMS para la Evaluación del Programa de Erradica-ción de la Viruela en América del Sur se reunió por primera vez en la ciudad de Rio de Janeiro el 15 de agosto de 1973; estaba constituida por los
siguientes miembros:
Dr. Alfredo N. Bica Brasil
Dr. Robert Wilson Canadá
Dr. J. Donald Millar Estados Unidos de América
Dr. Francisco Cambournac Portugal
Dr. Eriberto Echezuría Venezuela
Se eligi6 Presidente al Dr. Alfredo N. Bica, de Brasil; Vicepresi-dente al Dr. Robert Wilson, de Canadá, y Relator al Dr. Eriberto Echezuría de Venezuela.
Participaron en las discusiones representando al país huésped, Brasil, los Dres. Eurico Suzart de Carvalho Filho, Alyrio Macedo Filho, Arlindo
Lavigne y Joao Baptista Risi.
El secretariado quedó compuesto por el Dr. Bichat A. Rodrigues, Jefe, Departamento de Enfermedades Transmisibles, OPS/OMS; Dr. E. Shafa, Unidad de Viruela, OMS, Ginebra; Dr. Conrado Ristori C., epidemiólogo Zona VI, OPS/OMS; Dr. Mario Miranda, epidemiólogo Zona V, OPS/OMS; Dr. Edilberto Antezana, epidemiólogo Zona V, OPS/OMS; Dr. Italo Barragán, epidemi6logo
en Ecuador, OPS/OMS; Sr. Alberto Uribe, Oficial Técnico Zona IV, OPS/OMS, y Sr. Federico Varela, estadístico Zona V, OPS/OMS.
La Comisi6n realizó seis reuniones en el Instituto Castello Branco de Rio de Janeiro, durante las cuales examinó y discutió los informes de cada uno de los países que mediante acuerdos con la OPS/OMS efectuaron pro-gramas de erradicación de la viruela y que fueron presentados por miembros de los grupos tcnicos que ejecutaron o colaboraron en las actividades respectivas.
-2-En una de las sesiones se escuchó una presentación sobre el funcio-namiento de uno de los laboratorios de diagnóstico del país, Instituto Castello Branco, hecha por el Dr. Hermann Schatzmayr.
Además el Dr. Ruy Soares, de la Secretaría de Salud del Estado de Sao Paulo, hizo una presentación a la Comisión informando sobre las activi-dades de vigilancia y mantenimiento realizadas en aquel Estado y que no es-taban incluidas en el informe original. Con los niveles de cobertura
presentados y la investigación sistemática con apoyo de laboratorio de todo caso sospechoso, la Comisión consideró eficiente la Vigilancia Epidemioló-gica de la Viruela en el Estado de Sao Paulo.
La Comisión tuvo sus reuniones finales en Brasilia, donde se prepa-raron las conclusiones y recomendaciones de las cuales tomó conocimiento el Sr. Ministro de Salud del Brasil, Dr. Mario Machado de Lemos, durante una reunion especial con los miembros de la Comisin, y que se presentan a continuación.
* * * * *
La Comisión Especial de Evaluación de la Erradicaci6n de la Viruela en América del Sur analizó y discutió en detalle la informaci6n y la docu-mentación presentadas con relaci6n a los países que realizaron programas de erradicación con base en acuerdos firmados con la OPS/OMS.
Como resultado de ese estudio la Comisión llegó a las siguientes CONCLUSIONES:
1. COBERTURA
a. Se observó que la cobertura prevista en los planes de operación
para la fase de ataque fue en general alcanzada;
b. Brasil, el país mis importante desde el punto de vista de la
erra-dicación, por su extensin territorial, población, alto nmero de casos conocidos cada año, y por ser el ltimo foco de la enferme-dad, se destac6 por la cobertura obtenida, que alcanzó al 84% de la población estimada, superior a 90 millones de habitantes.
c. La fase de ataque se efectuó mediante campañas verticales con ex-cepción de algunos países en que estas acciones fueron realizadas por los servicios regulares de salud.
d. Los países que tiene acuerdo con la OPS/OMS para la erradicación de la viruela están efectuando programas de mantenimiento; sin embargo, en general se observa que la protección es insuficiente en menores de cinco años y en las reas de difícil acceso.
f. Es necesario que los datos estadísticos de vacunación sean des-glosados en primo y revacunados.
g. Se destacó la necesidad de que los países que tienen intercambio directo con zonas endémicas de viruela en otros continentes, por movimientos de su población, mantengan constante un elevado ndice de protección para evitar posible reintroducción de la enfermedad y posterior diseminación en las Américas.
2. VIGILANCIA EPIDEMIOLOGICA
a. Se pas6 revista al valor que los países de la Región conceden a la Vigilancia Epidemiológica, dentro de las actividades de sus servicios de salud; sin embargo, hay necesidad de perfeccionar el sistema de notificación en ciertas áreas de algunos paises.
b. Se puso de relieve la importancia de la labor que desarrollan los organismos internacionales, en coordinación con los países, para
organizar y fortalecer los sistemas de Vigilancia Epidemiológica, con la participaci5n de sus epidemiólogos.
c. Se llegó a la conclusión de que el sistema de Vigilancia Epide-miol6gica que Brasil mantiene en la actualidad es satisfactorio, considerando la existencia de una unidad de Vigilancia Epidemio-lógica para cada estado de la Federación, con extensión a los Te-rritorios, apoyado por una extensa red de puestos de notificación que cubre el 90% de los municipios del país.
d. Se reconoce la importancia de contar con una información regular y oportuna de todos los casos sospechosos.
e. Fue destacada la necesidad de que en los servicios de Vigilancia Epidemiol6gica participen médicos epidemiólogos con adiestramiento
adecuado.
f. En la notificacin de casos provenientes de zonas rurales se re-conoció la importancia de utilizar voluntarios de la comunidad, a los cuales se les proporcionará las facilidades necesarias para realizar esa labor.
g. Desde la ocurrencia del último caso de viruela en Sur América en abril de 1971, la confirmación del diagnóstico de cada caso sos-pechoso tiene una importancia fundamental. Por ello el examen de
- 4
-h. La mayoría de los países mantienen servicios eficientes para el diagnostico de laboratorio de viruela. Sin embargo, se llama la atención sobre la existencia de deficiencias en la recogida, acon-dicionamiento y envío de las muestras, que dificultan la
aplica-ción de las técnicas de diagnóstico en algunas oportunidades.
No hay intercambio de informaciones entre los laboratorios, inclu-sive dentro de un mismo país, ni se utilizan los servicios de los labora-torios de referencia de la OPS/OMS.
3. VÁCUNA
a. Las vacunas liofilizadas producidas por los países de la Región, de acuerdo con los exámenes realizados en los laboratorios de re-ferencia demostraron, en general, ser de buena calidad. La pro-ducción actual es suficiente para las necesidades de la Región y también para colaborar en el programa de erradicación en otras áreas del mundo a través de la OMS.
b. Algunos países siguen produciendo vacuna líquida para uso parcial o total en sus respectivas jurisdicciones.
c. La mayoría de los países no envían regularmente muestras de vacuna a los laboratorios de referencia.
La Comisión concluye que la transmisión de la viruela está interrum-pida en la Región de las Américas y que se encuentran así cumplidos los
re-quisitos establecidos por el Comité de Expertos en Viruela de la OMS para considerar la enfermedad erradicada.
RECOMENDACIONES
Con base en las conclusiones alcanzadas, la Comisión Especial hace las siguientes recomendaciones:
1. Que los países dediquen especial atención a los programas de man-tenimiento, particularmente con miras a obtener adecuada protec-ción de los menores de cinco años.
3. Que se utilice personal de otras instituciones para colaborar en la notificación de casos sospechosos y en la vacunación en zonas
ale-jadas y en áreas de difícil acceso.
4. Que la notificación de casos sospechosos y la vacunación en zonas de frontera sea considerada de la mayor importancia en los pro-gramas de mantenimiento y realizada cuando fuera factible mediante la colaboración entre países.
5. Que los países continGen dando la debida atención a los sistemas de notificaci6n y a su perfeccionamiento, especialmente en ciertas áreas, con el fin de contar con una información regular y oportuna de todos los casos sospechosos.
6. Que se disponga para los servicios de Vigilancia Epidemiológica del suficiente núcleo de epidemiólogos debidamente adiestrados y que todo caso sospechoso de viruela sea necesariamente investi-gado por un epidemilogo calificado, con toma de muestras en con-diciones satisfactorias para su envío al laboratorio.
7. Que para mejorar la cobertura del Sistema de Vigilancia Epidemio-l6gica en el área rural se proporcione a los notificantes, espe-cialmente a aquellos que no pertenecen a los servicios de salud, las facilidades necesarias para esa acción.
8. Que habiendo desaparecido la viruela de la Regíin de las Américas, la investigación de laboratorio de cada caso sospechoso tiene im-portancia fundamental como apoyo a las actividades de Vigilancia Epidemiol6gica, para lo cual se requiere que OPS/OMS propicie el establecimiento de un sistema que asegure la eficiencia técnica de los laboratorios que realizan el diagnóstico de casos sospe-chosos de viruela.
9. Que debe prestarse atención preferencial al mejoramiento en la recogida, acondicionamiento y envio de las muestras para evitar dificultades en la utilización de las diversas técnicas de diag-nóstico de laboratorio.
10. Que es importante estimular el intercambio de información entre los laboratorios de diagnóstico, sea del mismo país o entre países de la RegiSn, como asimismo la utilizaci6n de los servicios de los
laboratorios de referencia de la OPS/OMS.
11. Que si bien la gran mayoría de los países de las Américas producen y utilizan vacuna liofilizada, es importante que esta practica se extienda a todos los demás.
-6-13. Que con el propósito de adoptar una política uniforme en todos los países, el Consejo Directivo estudie la oportunidad de sus-pender el requerimiento de certificados de vacunación antivarió-lica entre los países de América, con el propósito de facilitar el tráfico internacional de pasajeros.
La Comisión escuchó con todo interés el excelente y minucioso informe sobre la Erradicaci6n de la Viruela de Brasil y felicitó al Dr. Eurico Suzart, Director del Departamento de Profilaxia del Ministerio de Salud, por su
pre-sentación clara y objetiva. Considera que en esta oportunidad se ha tomado conocimiento de un hecho verdaderamente histórico: la conquista de la
viruela en el Brasil.
La Comisión considera finalmente que el haber eliminado la viruela endémica que afectaba a un pais tan extendido, en un plazo tan corto, a través de un programa nacional, es un evento que no tiene paralelo en la historia de la salud publica moderna. Este inmenso logro debe ser motivo de orgullo para todos los brasileros, y especialmente orgullosos deberán sentirse todos aquellos que participaron en esta campaña. La Comisión con-gratula a todos y a cada uno de los que contribuyeron a este éxito