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Fiebre amarilla en las Américas

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Academic year: 2017

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Fiebre amarilla en las Américas

En el período de 1965 a 1979 se notificó a la Oficina Sanitaria Panamericana un promedio anual de 114 casos de fiebre amarilla selvática en la Región de las Américas. Entre 1967 y 1971 los países notificaron un número inferior al promedio señalado (fig. 1).

A partir de 1972 la enfermedad ha registrado una tendencia al ascenso, con ciclos bi o tri-anuales que han afectado a zonas en que no se habían registrado casos. El ciclo anual de transmisión (según datos de 1975 a 1978) se inicia por lo general en diciembre-enero, llegando a su ápice en los meses de abril a julio y des-cendiendo a su nivel más bajo entre septiembre y no-viembre.

En 1979, siete países (Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Perú, Trinidad y Tabago y Venezuela) notifi-caron casos de fiebre amarilla selvática. Esta es la pri-mera vez que esto ocurre en los últimos 15 años (cuadro 1), lo que señala un incremento de la enfermedad en la Región. Hasta el 31 de diciembre de 1979 se habían registrado 205 casos (cifras provisionales) (fig. 2).

Trinidad acusó un total de 18 casos de fiebre amarilla

selvática. Los primeros ocho ocurrieron entre el 27 de diciembre de 1978 y el 6 de marzo de 1979. Dos de los ocho pacientes murieron, el primero por fiebre amarilla y el segundo por una infección bacteriana con meningi-tis y abscesos hepáticos. Es interesante el hecho de que, hasta donde se pudieron obtener datos, este último paciente no había estado en ambientes selváticos. En el estudio del brote, y con objeto de aislar al virus, se usaron con éxito cultivos de células AP-61 (de Aedes pseudoscutellaris). Entre agosto y diciembre de 1979 se registraron 10 casos más de fiebre amarilla selvática. Después de la ocurrencia y confirmación de los primeros casos, cerca del 85% de la población fue vacunada con-tra esta enfermedad.

En Colombia, a mediados de 1978, se presentó una epi-demia en zonas rurales de la región del Tarra, vecinas a lugares boscosos en las que se registraron 28 defunciones por fiebre amarilla selvática, de las cuales 13 fueron con-firmadas. Algunos de los enfermos se trasladaron para su tratamiento a poblaciones urbanas vecinas infestadas porA. aegypti, donde murieron. Sin embargo, no se

com-Figura 1. Casos de fiebre amarilla selvática notificados en las Américas, 1965-1979.*

325 ,

300

250

o o

E E:

200

150

100

50so

1965 6 67 68 69 70 71 72 73 74 75 76 77 78 79

Ano

*Hasta el 31 de diciembre de 1979 (cifras provisionales)

(2)

Figura 2. Casos notificados de fiebre amarilla selvática, por país y divisiones administrativas principales, 1965-1979.*

Las áreas sombreadas representan divisiones politicas que notificaron casos de fiebre amarilla selvática.

(3)

Cuadro 1. Casos de fiebre amarilla selvática notificados de 1965 a 1979,* por país.

1965 1966 1967 1968 1969 1970 1971 1972

2 19 14 2 45 51 69 167 3 9 1 2 5 1 27 2 11 1

3 5

-- 1

8 4 7 28 1 2 2 7 75

5 5 - - -

-87 304 12 47 48 86

8 11 9

1973 1974 1975 1976 1977 1978 1979

9 86

12 70

3 16

7 2

-- 22 33 12 13 36 4 9 2 151 1 12 3 1 19 1 22 1 1 2 9 9 82 11 27 105 1 93

7 - - - - 3

10 12 51 14 97 18 3

28 55 212 76 168 44 102 240 205

*Hasta el 31 diciembre de 1979 (cifras provisionales). - Ninguno.

probaron casos transmitidos por este mosquito. En 1979 se notificaron 51 casos de fiebre amarilla selvática en Co-lombia, en los Departamentos de Cesar (13 casos), Mag-dalena (30), Meta (6) y Santander (2 casos).

Se desconoce el número de habitantes expuestos a contraer fiebre amarilla selvática, así como el número de vacunados contra la enfermedad en diversos países. A pesar de que la información regional es incompleta, se supone que esa cobertura en las zonas urbanas ha sido especialmente importante en Trinidad y Tabago, Venezuela y algunas ciudades colombianas.

La infestación por el Aedes aegypti sigue siendo im-portante en la Región de las Américas, y afecta a nume-rosas poblaciones urbanas en la porción continental, sobre todo en Colombia, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua y Venezuela, así como a numerosas islas del Caribe.

Estudios realizados recientemente en Colombia pare-cen indicar cambios en los hábitos de vectores considera-dos selváticos tradicionalmente.

En vista de la importancia de la situación actual, la OPS reunió en Washington en julio de 1979 a un grupo de expertos en fiebre amarilla para discutir el tema. El grupo consideró que, si bien la producción anual de vacuna es de 8 millones de dosis, de los cuales 6 millones se elaboran en la Fundación Oswaldo Cruz, de Río de Janeiro, y 2 millones en el Instituto Nacional de Salud de Bogotá, la cantidad almacenada es baja (2.1 millones en Río y 400,000 dosis en Bogotá). Por tanto, no cabe duda de que la vacuna disponible resulta completamente insu-ficiente para atender la demanda que generaría una posi-ble epidemia urbana. El grupo propuso que la cantidad que se almacena en forma permanente debe ser de 5 a 10 millones de dosis.

Advirtió que era necesario revisar los sistemas de vigi-lancia en uso actualmente y recomendó que deben vacu-narse solo las personas expuestas al riesgo. Aunque no

hay evidencia de acción teratogénica del virus 17D, las embarazadas deberán vacunarse solo si la exposición al riesgo lo amerita.

El grupo recomendó el empleo de células AP-61 en forma paralela con el de ratones para el aislamiento del virus y el uso de encuestas serológicas para detectar la

actividad vírica en el hombre.

Llamó la atención acerca de varios aspectos de investi-gación, algunos bien conocidos y otros bastante recien-tes, que deben tenerse en cuenta en las Américas. Estos

incluyen estudios de competencia de vectores de varias cepas de A. aegypti en la transmisión del virus de la fiebre amarilla, la transmisión genética y transovárica de la fiebre amarilla en el Aedes, el uso de líneas celula-res de insecto en los casos en los que no se pueden usar ratones para aislar y diagnosticar fiebre amarilla y posi-blemente como sustrato para la producción de vacuna, y la duración de anticuerpos en las personas vacunadas.

Otros aspectos nuevos y prometedores de investiga-ción incluyen el uso de la prueba ELISA para el sero-diagnóstico, el desarrollo de pruebas de radioinmu-noensayo y de inmuradioinmu-noensayo en capa delgada para la detección de antígenos, el uso de hibridomas para pro-ducir anticuerpos específicos in vitro y estudios de in-terferón en drogas antivíricas en el tratamiento clínico de la enfermedad.

Otras pruebas útiles que merecen comparación con las pruebas corrientes son las de neutralización por reduc-ción de placas, las de neutralizareduc-ción por inhibireduc-ción de focos fluorescentes e inmunofluorescencia en histología hepática.

Los consultores recomendaron que se realizara un seminario en las Américas en 1980. Una reunión de esta naturaleza debe contar con la participación de admi-nistradores, epidemiólogos, especialistas en control de vectores, ecólogos, investigadores de laboratorio y espe-cialistas en vacunas para estudiar el estado actual de la

4 Argentina Bolivia Brasil Colombia Ecuador Guyana Panamá Paraguay Perú Suriname Trinidad y

Tabago Venezuela

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fiebre amarilla en las Américas, reevaluar el riesgo de su urbanización, recomendar las medidas necesarias para prevenir y controlar la fiebre amarilla selvática y urbana y estimular la investigación siguiendo nuevas pautas que puedan resultar en cambios eficaces en la prevención o control, así como la difusión de informa-ción sobre nuevas técnicas diagnósticas.

Esta reunión se realizará en Belém, Brasil, del 18 al 22 de abril de 1980.

(Programa de Virología, Unidad de Control de Enfermedades Transmisibles, División de Prevención y Control de Enfermedades, OPS.)

Enfermedades objeto del Reglamento

Sanitario Internacional

Casos y defunciones por cólera, fiebre amarilla y peste notificados

en la Región de las Américas en 1979*

País y división Fiebre amarilla País y división Fiebre amarilla

administrativa Cólera - Peste administrativa Cólera Peste

principal Casos Casos Defunciones Casos principal Casos Casos Defunciones Casos

Bolivia - 10 7 2 Estados Unidos I - - 10

La Paz - 8 6 2 Arizona - 3

Santa Cruz - 2 1 - California 1

Colorado - - 2

Nevada - - - 1

Brasil - 12 9 - Nuevo México - - - 4

Amazonas - 2 2

Goiás - 3 2 - Perú - 97 87

-Pará - 5 3 - Ayacucho - 5 5

-Rondónia - 2 2 - Huánuco - 24 22

-Junín - 34 31

-Loreto - 2

-Colombia - 51 36 - Madre de Dios - 13 13

-Cesar - 13 13 - Puno - 3 3

-Magdalena - 30 15 - San Martín - 16 13

-Meta - 6 6

Santander - 2 2 - Trinidad y Tabago - 18 7

-Trinidad - 18 7

Ecuador - 14 13 - Venezuela - 3 2

-Napo - .. - Mérida - 1 1

-Zamora/Chinchipe - 13 13 - Zulia - 2 1

-*Cifras provisionales. -Cantidad cero. ... No se dispone de la información.

Imagem

Figura  1.  Casos  de  fiebre  amarilla  selvática  notificados  en las Américas,  1965-1979.* 325  , 300 250 o o E E: 200 150 100 50so 1965  6  67  68  69  70  71  72  73  74  75  76  77  78  79 Ano
Figura  2.  Casos  notificados  de  fiebre  amarilla  selvática,  por  país  y divisiones  administrativas  principales,  1965-1979.*
Cuadro 1.  Casos  de  fiebre  amarilla selvática  notificados  de  1965  a 1979,*  por país

Referências

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