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3. Somatismos

3.4. Somatismos y taxonomía de las UF

3.4.3. Enunciados fraseológicos

En la tercera esfera de su clasificación de las UF del sistema fraseológico español Corpas ubica los enunciados fraseológicos, los cuales “se caracterizan por constituir actos de habla y por presentar fijación interna (material y de contenido) y externa”

(132). Dentro de esta categoría de UF Corpas distingue dos grandes tipos: las paremias y las fórmulas rutinarias, ambos con su taxonomía propia.

PAREMIAS

En lo que respecta a la taxonomía de las paremias seguimos la clasificación de Sevilla y Crida (2013), por ser más reciente y basada en largos años de estudios concretos en el campo de la paremiología.

El lexema paremia, de origen griego, constituye en español el archilexema (Sevilla, 1988: 231) o hiperónimo (Corpas, 1996: 135) de los enunciados breves y sentenciosos que componen el universo parémico, los cuales, a su vez, comparten características

comunes con el resto de las UF. Para su clasificación, Sevilla y Crida aplican criterios de origen, pragmáticos, morfológicos y semánticos. Así pues, hacen una primera gran distinción entre paremias de origen conocido y paremias de origen desconocido y si son paremias de uso culto o paremias de uso popular (108), para llegar a establecer una taxonomía de seis categorías: proverbios, aforismos, refranes, frases proverbiales, locuciones proverbiales y dialogismos.

A continuación solo nos referiremos a aquellos tipos de paremias de los que hayamos encontrado somatismos en las lenguas que nos ocupan.

Se dan somatismos en los proverbios, los cuales son considerados de origen conocido y de procedencia culta, cuyas características particulares son la antigüedad, el tono grave, la potencial variación y el uso preferentemente culto (Sevilla y Crida: 109).

Veamos los siguientes ejemplos:

Ojo por ojo, diente por diente (Crida, 1999:

73)

Οφθαλμόν αντί οφθαλμού, οδόντα αντί οδόντος (Crida, 1999: 73)

Dicho acerca de la venganza justiciera, que justifica el castigo según el agravio

Ver la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio (Crida, 1999:

99)

Κάρφος εν τῷ ὀφθαλμῷ [paja en el ojo] (Papazafiri: 83)

Dicho acerca de quienes

acrecientan los defectos ajenos sin ver los propios

El primer proverbio bíblico es un fragmento tomado de Éxodo 21: 24, el cual por su origen tiene su traducción exacta (calco) tanto en español como en griego. Es la denominada «ley del talión»21. En griego la fijación se ha dado en griego antiguo pero con escritura monotónica en la actualidad. El segundo ejemplo de somatismo proviene de Lucas 6: 41. Es interesante observar que estas UF son vistas y clasificadas como proverbios bíblicos por los paremiólogos, mientras que los fraseólogos verían en el primer ejemplo, tanto español como griego, sintagmas nominales con estructura de

21 Dicha ley no era una ley de venganza, sino precisamente un medio de poner límite a la venganza y frenar la violencia imperante en el mundo hace cuatro mil años.

binomio N+Prep+N, y en el segundo ejemplo una locución verbal de estructura compleja en el español y en la UF griega un sintagma nominal con estructura N+Prep+N(en dativo), el cual también presenta una forma en griego moderno ya vista como locución verbal: γίνομαι/είμαι καρφί/κάρφος στο μάτι (κάποιου) [llegar a ser/ser clavo/paja en el ojo (de alguien)] (DLGM), sin embargo con sentido diferente al del español. La dificultad para distinguir entre ciertas paremias y las locuciones de significado traslaticio ha sido señalada por Corpas, quien agrega que “ambas encierran una imagen expresiva, intensa e impactante, y comparten tropos y recursos fónicos de todo tipo” (133-134), por lo que tradicionalmente encontramos locuciones en obras paremiográficas. Asimismo, Corpas subraya que “muchas locuciones se han originado frecuentemente a partir de una paremia” (134); tal es el caso de γίνομαι/είμαι καρφί/κάρφος στο μάτι (κάποιου), el cual no es el único en griego.22 Somatismos también se dan en los aforismos, que son descriptos como enunciados sentenciosos “de origen conocido, cuyas características son la procedencia culta, el potencial conocimiento del autor, el tono grave, el alto grado de fijación interna, la gradación idiomática, la escasa variación y el uso preferentemente culto” (Sevilla y Crida: 109). Como ejemplo traemos el aforismos: La cara es el espejo del alma, que significa que en el rostro se refleja el estado de salud y de ánimo, así como el carácter de una persona. Se trata de una frase de Cicerón23. En griego se dice frecuentemente que Τα μάτια είναι ο καθρέφτης της ψυχής [Los ojos son el espejo del alma]; sin embargo, la frase aparece en DLGM, solo bajo el lema espejo, como ejemplo de la acepción 3. cualquier cosa que dé la imagen representativa (de alguien).

22 Por ejemplo la locución verbal de uso muy frecuente κρατώ μικρό καλάθι [sujetar pequeña cesta] es la segunda parte del refrán Όπου ακούς πολλά κεράσια, κράτα και μικρό καλάθι [Donde oigas muchas cerezas, sujeta pequeña cesta] (Crida, 1999: 165).

23 Imago animi vultus, iudices oculi (De oratore 3, 57.221.H.615.8.697) (Cantera, 2005: 25). La segunda parte, no siempre mencionada, es: y los ojos sus delatores.

La frase blood, toil, tears and sweat de Winston Churchill es también un buen ejemplo de aforismo con somatismos, la cual ha pasado a decirse en muchos idiomas, con algunas variantes:

Sangre, sudor y lágrimas Αίμα, δάκρυα και ιδρώτας Expresado de algo que requiere gran esfuerzo El refrán ha sido definido como “una paremia de origen anónimo y uso popular, cuya estructura es generalmente bimembre, con presencia de elementos mnemotécnicos, con potencial presencia de elementos jocosos, basado en la experiencia y con valor de verdad universal, en su gran mayoría” (Sevilla y Crida: 111). Dentro de los refranes hay muchos somatismos; a modo de ejemplo referimos los refranes españoles: En boca cerrada no entran moscas; Ojos que no ven, corazón que no siente; Al villano, dadle el dedo, y se tomará la mano; De la mano a la boca, se pierde la sopa; Al dolor de cabeza, el comer le endereza; De tal cabeza, tal sentencia; Tripa vacía, corazón sin alegría; y en griego: Απ' το κεφάλι βρωμάει το ψάρι, Σηκώθηκαν τα πόδια και βαράνε/να χτυπήσουν το κεφάλι, Φάτε μάτια ψάρια και κοιλιά περίδρομο, Άλλα τα μάτια του λαγού κι άλλα της κουκουβάγιας.

En muchos casos se da la concordancia entre refranes españoles y griegos que contienen somatismos, como en:

Ojos que no ven, corazón

que no siente Μάτια που δεν βλέπονται, γρήγορα λησμονιούνται [Ojos que no se ven, pronto son olvidados]

La ausencia contribuye a olvidar lo que se ama o a sentir menos las

desgracias lejanas (RM) Más vale ser cabeza de

ratón que cola de león

Κάλλια να είμαι κεφαλή ποντικιού, παρά ουρά λιονταριού [Mejor que (alguien) sea cabeza de ratón que cola de león]

Es preferible ser el primero y mandar en una comunidad, aunque sea pequeña, que ser el último en otra mayor (RM)

La frase proverbial, a diferencia del refrán, se caracteriza por presentar una estructura unimembre y, en general, por carecer de elementos mnemotécnicos (Sevilla y Crida:

112). Los siguientes ejemplos ilustran la presencia de somatismos en frases proverbiales: Ninguno/nadie escarmienta en cabeza ajena, o sea, la experiencia ajena no es suficiente para desengañarnos, por lo que solo aprendemos de nuestros errores o desgracias (RM), (Και) οι τοίχοι έχουν αυτιά [(También) las paredes tienen orejas], que tiene su concordancia semántica en español en otra frase proverbial, que no constituye somatismo: Las paredes oyen, a pesar de la prosopopeya y del verbo, de los que infiere el término orejas.

Otro tipo de paremia comprendida en el grupo de las de origen desconocido y de uso preferentemente popular es la locución proverbial. Locuciones verbales son consideradas proverbiales solo cuando poseen carácter de enunciado sentencioso (Sevilla y Crida: 112). Obviamente, su núcleo verbal es conjugable y pueden estar precedidas por la fórmula de mandato negativo: No hay que... Ejemplo de locución proverbial con SO es: Tirar la piedra y esconder la mano, que alude a quien hace alguna faena y, luego, se oculta, sin reconocer su culpa. Como apuntan los estudiosos, arriba mencionados, este grupo de paremias “está a caballo entre el mundo de las paremias y el de las locuciones”, a consecuencia de esto es una tarea dificultosa

“poner barreras nítidas” ente ellos (Crida y Sevilla: 71).

Por último, el dialogismo es un tipo de paremia que se caracteriza por su estructura dialogada. Dialogismos que contienen somatismo son: —¿Adónde va la lengua? Adonde duelen las muelas, o sea que de la misma manera que instintivamente la lengua va a la muela doliente para intentar aliviarla, cada uno sabe mejor que nadie lo que le perjudica o lo que le conviene (RM); “No fue nada lo del ojo”, dijo una vieja, y tenía el ojo en la mano, dicho de alguien que ha sufrido un percance pero por

dignidad no demuestra su dolor. Ejemplo de dialogismo en griego es Είπε ο γάιδαρος τον πετεινό “κεφάλα” [Dijo el burro al gallo "cabezudo"] (DULGM).

FÓRMULAS RUTINARIAS

Finalmente, en la tercera esfera de la clasificación de Corpas, el segundo tipo de enunciado fraseológico está integrado por las llamadas fórmulas rutinarias, o sea enunciados que “se diferencian de las paremias por carecer de autonomía textual, ya que su aparición viene determinada, en mayor o menor medida, por situaciones comunicativas precisas”, dado que son UF del habla (Corpas: 170).

Dado que las fórmulas rutinarias se expresan en actos de interacción social habituales y estereotipados (y hasta ritualizados), cumplen diversas y numerosas funciones según situaciones específicas.

Son muy abundantes los SO en las fórmulas rutinarias, por lo que mencionaremos solo algunos ejemplos con correspondencia en ambas lenguas.

¿Has perdido la lengua?

¿Te ha comido la lengua el gato? (DFDEA)

Kατάπιες τη γλώσσα σου;

[¿Tragaste tu lengua?]

(DLGM)

Fórmulas para invitar a romper el silencio del interlocutor

¡Punto en boca! (DDFE) Ράψτο/Ράφτο! [¡Cósela!]

Βούλωστο! [¡Tápala!] (la boca)

Fórmulas para imponer silencio

¡Abre ojo, que asan carne! (DDFE)

Έχε τον νου σου! [¡Ten la mente tuya¡] (DULGM)

Fórmulas para advertir sobre un peligro

¡Las manos quietas!

(DDFE) Κοντά τα χέρια σου!

[¡Cerca las manos tuyas!]

(DULGM)

Fórmulas para detener a quien pretende propasarse en tocamientos

Me juego la cabeza Κόβω το κεφάλι μου/το χέρι μου [Corto la cabeza mia/la mano mia]

(DULGM)

Fórmulas para enfatizar una afirmación,

suposición, etc.

Para preguntar qué le pasa a alguien hay quien usa la fórmula coloquial ¿Qué tripa se le ha roto? (DFDEA). Para rechazar un abuso o un ofrecimiento engañoso o impertinente se usa la fórmula ¡A otro perro con ese hueso!

Como refuerzo de una expresión negativa, por desacuerdo o rechazo, se usa la fórmula ¡Ni+N+(qué) narices! En el registro vulgar y grosero de la lengua se expresa fuerte rechazo mediante fórmulas somáticas con los órganos genitales, como ¡qué+

N+ni que cojones! ¡Qué+N+ni qué coño!, cuya concordancia griega es αρχίδια+

ουσιαστικό [cojones+ sustantivo].

También hay somatismos en fórmulas desiderativas, como Από το στόμα σου και στου Θεού τ' αυτί! [Desde la boca tuya a de Dios la oreja].